Cifras entregadas por la Agencia para la Reincorporación y la Normalización, establecieron en el Huila, que más de 50 firmantes han reportado amenazas de muertes. Preocupan además los incumplimientos de los acuerdos.
DIARIO DEL HUILA, REGIONAL
Por: Gloria Camargo
Varios retos tienen a la fecha el departamento del Huila de cara a los cumplimientos de los acuerdos de paz con respecto a los firmantes. Así lo dio a conocer en su visita a la ciudad de Neiva, Alejandra Miller, directora nacional de la Agencia para la Reincorporación y la Normalización.
Según la funcionaria, frente al proceso de reincorporación y los retos que se tiene de cara al futuro, las problemáticas que persisten son principalmente derivados por la seguridad.
“En el Huila particularmente tenemos retos enormes. Tenemos más de 700 personas en proceso de reincorporación y tenemos problemas asociados a la sostenibilidad de los proyectos y la seguridad”, señaló.
Miller también explicó que desde el 2019 al 2022, “11 firmantes han sido asesinados en el departamento del Huila. Entonces ahí tenemos retos importantes y enfrentamos procesos de transformación del enfoque político de la Agencia, que debe transitar de un enfoque minimalista en el cumplimiento a un enfoque que garantice el cumplimiento de lo pactado”.
Empoderamiento de género
La directora indicó que, con respecto a los firmantes del acuerdo de paz, “tenemos retos a partir del empoderamiento de las mujeres en el territorio, es decir con lo que tiene que ver con la reincorporación económica, política y social. Entonces eso es parte de lo que tenemos que fortalecer, y al mismo tiempo encaminar más acciones en el departamento del Huila”.
Cifras entregadas por la entidad, establecen que además en la región, el papel de la mujer en la consolidación de la Paz Total será fundamental. Razón por lo cual se resalta la conformación de siete unidades asociativas, las cuales se encuentran localizadas en los municipios de Neiva, Íquira y Algeciras, en las que se reúne a las mujeres en mejores formas de trabajo basadas en la producción y comercialización de productos como café, huevos, bizcochos de achira, promoción de turismo, entre otras.
Así mismo se ha logrado establecer que actualmente, la ARN adelanta el proceso de reincorporación con 123 mujeres en el departamento del Huila.
“Habrá un plan para sostenibilidad de sus proyectos y un enfoque para que estos no sean la extensión del rol del cuidado. Serán empresarias, con formación y activas laboralmente”, puntualizó Miller.
Fortalecimiento estatal
La directora Nacional también explicó, durante sus declaraciones en Neiva, que, desde el Gobierno nacional y encaminada en la política de la Paz Total, se está trabajando en un sistema de fortalecimiento.
“Primero debemos reconocer que hay un acumulado de incumplimientos, y eso es donde debemos enfocar nuestro trabajo. Luego diseñaremos unas estrategias, para avanzar en el cumplimiento de los acuerdos. Precisamente con los firmantes tenemos nuevos por ejemplo incumplimientos y demoras en términos de acceso a la vivienda y a la tierra, por lo que debemos enfocar los esfuerzos en lo que respecta el fortalecimiento de los proyectos productivos y sostenibilidad.
Desde la Agencia ya están identificados cuáles son esos acumulados en el cumplimiento, y estamos justamente en el diseño de las estrategias para poder dar pasos hacia delante, de tal manera que desatrasemos lo que encontramos atrasados”, puntualizó la directora.
Amenaza a la vida
Entre los puntos más importantes, sin duda son los asesinatos sistemáticos de los cuales han sido víctimas los firmantes de paz, en el departamento del Huila.
“Aquí se ha reportado por parte de los firmantes que hay más 50 de ellos que por hoy tienen amenazas en términos de seguridad. Tenemos que trabajar sobre varias estrategias, y si bien la Agencia para la Reincorporación no puede proveer de chalecos, carros, blindados, etc., y persiste una preocupación grande por la seguridad, pero creemos que también hay que ver la seguridad desde otro punto de vista”, expresó la funcionaria.
Según la funcionaria, lo que se plantea es la denominada la reincorporación comunitaria. “La reincorporación comunitaria es poner en el centro a la comunidad, para que acoja el proceso de reincorporación y para que se hagan procesos profundos de reconciliación. Es decir que de tal manera que la sociedad, a partir de la compresión, de la reconciliación, de lo que significa un proceso y acuerdo de paz, unos firmantes que dejan las armas, pues sea las mismas comunidades terminen también protegiéndolos y protegiendo el proceso”, puntualizó.
Aunque se ha establecido, que si bien es un proceso establecido a largo plazo, desde el Gobierno nacional, se apunta a que sea sostenible, y pueda de esta manera mejorar y contribuir a mejorar la seguridad de los firmantes, sin embargo también se ha establecido que deben haber acciones concretas y aplicables a corto plazo.
“La Agencia, le paga a unos analistas de riesgos adicionales para que agilicen los procesos del análisis de riesgo de los firmantes del acuerdo de paz. Nosotros tenemos un rol importante en términos de la seguridad y de apoyo a la seguridad que presta la fuerza pública alrededor de los espacios de territoriales. Hay que seguir fortaleciendo las estrategias en el corto plazo”, detalló.
Trabajo conjunto
Finalmente, la directora Nacional, señaló que la idea ahora es “jalar para el mismo lado en términos de la reincorporación digna, que es lo que nos garantiza realmente la no repetición y que les envía un mensaje importante a los grupos que vienen en el marco de la paz total en términos de cumplimiento”.
Y agregó que frente a este trabajo hay expectativas positivas en términos que respectan al cumplimiento básico de los derechos y acuerdos pactados.
¿Qué opinan los firmantes?
Víctor Hugo Silva Soto, representante legal de la cooperativa Cooagropaz, indicó que el llamado más fuerte que se hace desde los territorios tiene que ver con la descentralización de las políticas de reincorporación.
“Es una de las cosas que nos está preocupando y es una de las insistencia que nosotros le estamos haciendo al Gobierno y es la descentralización para que se tenga una política con enfoque territorial”, puntualizó.
Caber recordar que Cooagropaz ha sido destacada a nivel nacional como uno de los mejores empleos en brindar oportunidades para la reintegración de excombatientes y firmantes del acuerdo de paz.
Este proyecto cuenta con una cobertura nacional, y están ubicados en el sur del departamento del Tolima y en todo el departamento del Huila, al igual que se desarrollan varias propuestas productivas en Bogotá. “La cooperativa tiene 900 asociados, de ellos 350 son reincorporados y el resto son víctimas y personas campesinas”, explica Silva.
Proyectos productivos
“Entendemos que la reincorporación debe tener un componente reparador, entonces estamos trabajando con víctimas, o sea la cooperativa también es de víctimas y campesinos que viven en aquella zonas de mayor afectación por el conflicto. Ahí estamos trabajando y estamos construyendo proyectos productivos basados en el desarrollo de los territorios”, resaltó el líder.
No obstante, señaló que si bien se cuenta con varios núcleos productivos persisten las dificultades.
“Todavía no tenemos acceso a la tierra y en algunas zonas estamos pagando un canon de arrendamiento y eso nos ha creado cierta dificultades, pero hoy estamos tratando de resolver esa serie de situaciones. De igual manera venimos trabajando con un enfoque de género y para ello adelantamos proyectos en torno a caficultura, o sea la transformación del café con las mujeres, entre otros. Pero creemos que si no hay inversión y desarrollo en el campo va a ser difícil pasar pronto la página del conflicto social y armado en Colombia”, puntualizó.
Respeto por la vida
Finalmente, Víctor Hugo Silva Soto, dijo que la mayor preocupación a la fecha sigue siendo la seguridad de los firmantes.
“Nos preocupa el problema de seguridad. Créame que es una gran preocupación, nosotros le apostamos a la paz y el asesinato de aquellos que hacían parte de los procesos nos tiene un poquito preocupados, porque, ¿de qué sirve que nosotros desarrollemos proyectos productivos que a la larga no vamos a gozar porque nos van a matar?”, inquirió.
Razón por la cual reiteró que buscan despolitizar los “instrumentos que están en torno a la seguridad de los excombatientes porque esto se convirtió en una bolsa de empleo y desafortunadamente es una tendencia de los firmantes de los acuerdos de paz que están agrupados en un partido sean limitados y no nos deja participar plenamente en ese beneficio que es la vida”, concluyó.