Según la Organización para la Educación y Protección Ambiental-OPEPA, Colombia es uno de los países más biodiversos del mundo. Contamos con el 21% de especies de aves en el mundo, el 17% de anfibios, el 8% de peces dulceacuícolas, el 8% de reptiles, el 16% de mariposas diurnas, el 10% de mamíferos (456 especies reportadas), entre otros, al menos 1200 especies de peces marinas y 1600 especies de agua dulce. Es el segundo con mayor variedad de mariposas: 3000 familias y 14 especies y más de 250.000 variedades de coleópteros. Es el primero en especies de anfibios (15%) con el 30% de las especies de tortugas y 25% de las especies de cocodrilos, además de 222 especies de serpientes. Acá existen 30 especies de primates, lo que la coloca en el quinto lugar a nivel mundial en diversidad de números de estas especies.
Clasificar a la fauna, de acuerdo con las prescripciones que contienen las normas, nos permite decir que esta está compuesta por: a) animales bravíos o salvajes, que son los que viven naturalmente libres e independientes del hombre, como las fieras y los peces; b) animales domésticos, que son los que pertenecen a especies que viven ordinariamente bajo la dependencia del hombre, como las gallinas, las ovejas y los cerdos; c) animales domesticados, los que, sin embargo de ser bravíos por su naturaleza, se han acostumbrado a la domesticidad del hombre.
Al seguirse la manera como el Código Nacional de los Recursos Naturales Renovables y de Protección al Medio Ambiente presenta y agrupa las disposiciones sobre fauna, encontramos que la divide entre fauna terrestre (Parte IX) y fauna acuática (Parte X, Título I). Y aunque el Código no trae una definición de fauna, ni de la una o de la otra, podemos derivar de los artículos 266 y 267 un concepto: la primera será el conjunto de animales existentes y que se desarrollan y tienen su hábitat sobre tierra firme y la segunda, serán los seres vivos animales hidrobiológicos que se desarrollan y tienen su hábitat en el medio acuático y que se hallan en aguas territoriales y jurisdiccionales, marítimas, fluviales o lacustres. Y, ¿qué pasa con la fauna atmosférica?
De acuerdo con su hábitat, se ha clasificado en fauna nativa, fauna introducida, fauna invasora. También se los divide en: peces, aves, anfibio, reptiles y mamíferos.
En materia de fauna, la normativa merece una revisión en cuanto a las maneras de adquirir el derecho a aprovecharla de manera sostenible. Porque tenemos usos por ministerio de la ley cuando se caza para subsistencia, permisos, autorizaciones y licencia ambiental. Además, tenemos registros para los exportadores y comercializadores y, el salvoconducto para el transporte.
Por supuesto lo que más debemos trabajar, es en cuanto a la eficiencia en los controles de la caza y comercio ilegal.