La exfuncionaria del gobierno de Petro también previó problemas con su plan de seguridad días antes porque ella salió del país y no tenía protección a su regreso. La UNP ya encontró una solución, pero están evaluando la posibilidad de que el exministra continúe o modifique el plan actual.
Cecilia López, exministra de agricultura, está preocupada por su vida. El viernes reveló que había sido amenazada y le pidieron que abandonara el país. “He recibido dos avisos para salir del país en los últimos dos días. el por qué es un misterio para mí. Mi seguridad está en grave peligro, me dijeron», dijo López a la revista Semana.
Pese a las advertencias, la exministra reafirmó que por el momento no tiene planes de salir del país. López fue uno de los siete funcionarios de gobierno que renunció a la administración de Gustavo Petro el 26 de abril luego de que el jefe de Estado pidiera la renuncia formal de todo su gabinete la noche anterior, el 25 de abril.
Aunque algunos de los funcionarios que fueron expulsados de los ministerios fueron trasladados a embajadas y otros cargos, López no ha recibido la misma oferta. Jhenifer Mujica la sucedió en la cartera de Agricultura.
El 28 de abril, López salió del país luego de renunciar a su cargo como funcionaria del Ministerio de Agricultura. La exfuncionaria aseguró que el 12 de mayo, un día antes de su regreso, la UNP le envió un correo electrónico informándole que las protecciones que le habían otorgado le serían retiradas paulatinamente. Pero cuando llegó al aeropuerto El Dorado de Bogotá, descubrió que no había personal de seguridad esperándola.
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Durante 90 días después de dejar el cargo, un ministro u otro funcionario gubernamental de alto rango puede continuar utilizando el plan de protección que se le proporcionó mientras estuvo empleado. Después de ese tiempo, la UNP realizará una investigación para determinar su nuevo nivel de riesgo y luego le proporcionará un nuevo plan de seguridad Dado que el caso de López aún está pendiente, ha retomado temporalmente su plan original
La exministra, que supervisó una de las iniciativas más ambiciosas del gobierno de Petro, la reforma agraria, fue obligada a dejar el cargo porque fue una de las empleadas que firmaron la carta en la que se exponían las preocupaciones internas con la reforma de salud.
Días antes de esa reorganización ministerial, el exministro López fue el centro de una riña gubernamental cuando cuestionó a la ministra de Minas, Irene Vélez, sobre su estrategia energética. El gobierno se ofendió por el comentario, y la ministro Vélez respondió diciendo que la entonces ministra de agricultura «quería decir otra cosa».
