La Sala de Casación Penal de la Corte Suprema de Justicia confirmó este jueves las condenas impuestas a dos exministros y un exdirector del Departamento Administrativo de la Presidencia de la República (Dapre) por su participación en un escándalo de cohecho, vinculado a ofrecimientos ilegales a congresistas para garantizar la aprobación de la reelección presidencial en 2004.
Los exfuncionarios Sabas Pretelt de la Vega, exministro del Interior; Diego Palacio Betancourt, exministro de Protección Social; y Alberto Velásquez Echeverri, exdirector del Dapre, fueron hallados culpables de ofrecer prebendas burocráticas a los entonces congresistas Yidis Medina y Teodolindo Avendaño, a cambio de influir en su voto o abstención para que el proyecto de reelección del entonces presidente Álvaro Uribe continuara su curso legislativo.
La decisión ratifica las condenas iniciales impuestas el 15 de abril de 2015, cuando la Corte Suprema, en única instancia, los sentenció por el delito de cohecho por dar y ofrecer. Sin embargo, el proceso fue reabierto para garantizar la doble conformidad judicial, un derecho fundamental que asegura que una persona condenada pueda apelar su sentencia ante una segunda instancia.
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En su pronunciamiento, la Corte Suprema sostuvo que las pruebas, incluyendo la declaración de Yidis Medina y otros indicios, confirmaron que los tres procesados actuaron de manera coordinada y con un reparto de tareas, con el objetivo de influir en el resultado de la votación. Según el fallo, los acusados jugaron un papel determinante al persuadir y disuadir a los congresistas involucrados para que, a través del ofrecimiento de cargos y prebendas, el proyecto de la reelección siguiera adelante.
El alto tribunal concluyó que los exministros y el exdirector del Dapre tenían el «dominio del hecho», ya que poseían la capacidad para manipular las acciones de Medina y Avendaño, quienes con su voto, o la abstención del mismo, permitieron que el proyecto legislativo prosperara.
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