Desde hace dos semanas los departamentos de Nariño y Cauca se encuentran en emergencia después de un grave deslizamiento en la vía Panamericana, en el sector de Rosas. Esta situación ha conllevado a que en esta zona haya desabastecimiento de ciertos alimentos, escasez de gasolina y desconexión terrestre de los departamentos con el centro del país.
El consejero para las Regiones, Luis Fernando Velasco, estima que en un mes se podría reabrir la vía a la altura del municipio de Rosas, Cauca. «La vía está bastante avanzada. Tenemos la variante de dos kilómetros y aspiramos a que entre 20 y 30 días ya esté habilitada», afirmó.
El alto funcionario, además, sostuvo que por ahora hay vías alternas que también están siendo intervenidas para que se conecten con otros pasos viales que unen a Nariño con Cauca y el interior del país. Entre las opciones se encuentran la Panamericana y su conexión con La Sierra, en Cauca. Asimismo, la vía que une a El Patía con El Tambo, en Cauca.
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A la fecha se calcula que las pérdidas en estas últimas dos semanas por el cierre de la vía superaron los 1,5 billones de pesos en Cauca y Nariño. El gobernador de Nariño, Jhon Rojas, propuso que el Gobierno Nacional asuma el sobrecosto en transporte de gas, alimentos e insumos desde y hacia el departamento. Finalmente, instó a acelerar la construcción de la variante San Francisco – Mocoa, en Putumayo, como alternativa para agilizar el transporte, debido a filas interminables de vehículos con viajeros desesperados que arriesgan sus vidas en trochas junto a abismos para llegar a Popayán, de ahí a Cali y luego, al interior del país.
