Diario del Huila

Educación y Pandemia

Abr 5, 2022

Diario del Huila Inicio 5 Opinión 5 Educación y Pandemia

Carlos Yepes A.

cyepes@hotmail.com

El ambiente de polarización y el agite social provocado por la contienda electoral suele apartarnos de temas fundamentales como el efecto de la pandemia sobre nuestros niños y jóvenes en la educación. Para cualquier sociedad ésta debe representar el principal factor de progreso económico y social. En el Huila al igual que en muchas partes del planeta no todos los niños tuvieron las oportunidades, las herramientas o el acceso necesario para seguir aprendiendo durante la pandemia, esto hace necesario para el departamento, que ostenta indicadores que preocupan en varios de sus sectores, el tener que enfocarse en tratar de entender que pasó y hacia donde debemos ir en materia de educación, es fundamental.

La presencialidad retornó hace ya más de seis meses, el cierre de los colegios mostró su importancia junto con la de las instituciones y los maestros. Con ella volvió el desarrollo de habilidades que sólo se logran fortalecer gracias a la convivencia escolar. Ya se cuenta en el país con resultados de investigaciones que nos permiten en principio orientarnos en los procesos que fueron debilitados por el encierro que vivieron nuestros estudiantes.

Después de estos seis meses nos hemos dado cuenta de que en casa no existió siempre un ambiente propicio para el desarrollo académico o socioemocional adecuado. En casa existen muchas distracciones o no tuvieron muchas veces espacios adecuados como un escritorio o un lugar alejado del ruido, además muchos padres no fueron lo suficientemente buenos tutores como hubieran querido serlo a pesar de sus valiosos esfuerzos, no eran expertos en enseñanza y no tenían por qué serlo, las clases en casa exigían también un maestro que muchas veces no pudieron tenerlo.

Adicionalmente el encierro cambió drásticamente la rutina de los niños generando efectos psicológicos como el estrés por no poder llevar a cabo los aprendizajes como debieran ser, los aumentos de la violencia intrafamiliar (niños golpeados o abusados por familiares o padres), violaciones y demás conflictos terminaron seguramente afectando la convivencia y la salud mental.

La presencialidad también ha traído de vuelta algo fundamental, el desarrollo de habilidades. Sólo departiendo en una escuela los niños son capaces de desarrollar importantes destrezas y habilidades como la socialización, la empatía, la interacción, la comunicación asertiva y muchas más que se alejan de poder desarrollarse por medio de televisores o computadores y menos de manera aislada como estuvieron sobre todo los adolescentes encerrados en su “cuevas” o habitaciones. La empatía, por ejemplo, así como la capacidad de relacionarse con los demás y la solución de conflictos de manera pacífica se aprenden en la interacción con el otro.

Dos Universidades, los Andes y la Javeriana han aportado resultados de sus investigaciones, por ejemplo, en la parte académica resaltan que los cierres afectaron desproporcionadamente a los niños, niñas y adolescentes en el país, porque no todos tuvieron las oportunidades, las herramientas o el acceso necesario para seguir aprendiendo durante la pandemia.

De acuerdo a sus investigaciones, en el 2019, antes de pandemia, la brecha entre colegios privados y públicos era de 24 puntos, a favor de los privados y en pandemia aumentó casi a 30 puntos en el 2020 y en un informe para el 2021 se muestra que siguió aumentando y se ubica en 32 puntos.

También revelan que cerca del 40% de los estudiantes, de acuerdo con sus cuidadores, no aprendieron nada el último año de cierre de colegios o su aprendizaje se estancó; 49% de los estudiantes tuvo acceso a plataformas educativas; 59% a clases con el profesor y 50% clases grabadas; prevalecen actividades por Whatsapp (82%) y guías impresas (80% en primaria y 56% en secundaria).

Ambas fuentes de investigación concuerdan, dentro de sus resultados, con que el rendimiento académico de los estudiantes bajó y, además, dieron a conocer los efectos negativos de la pandemia en los procesos de aprendizaje, en la salud mental y emocional de los niños, en el desarrollo de ciertas habilidades cognitivas y socio emocionales como la comunicación asertiva, las relaciones interpersonales, entre otros.

En salud mental por ejemplo aseguran que los indicadores demuestran una mayor prevalencia de tristeza, estrés, depresión, y angustia en los niños, niñas y adolescentes.
Para la docente Sandra García, también hay afectaciones en salud emocional ya que “más del 50% de los cuidadores reportan algunas señales de alarma relacionadas con dificultades para concentrarse de sus niños, más alto de lo que se observaba antes del cierre de colegios y altos niveles de desmotivación, lo que conlleva a riegos de deserción”.

La conclusión de los estudios revela la necesidad de que se implementen estrategias y políticas de nivelación académica en áreas como: Matemáticas, Ciencias y Lenguaje. También es importante que se hagan mediciones y evaluaciones de cómo está la salud mental de los estudiantes y docentes, que haya en los colegios psicólogos o psico-orientadores que realicen una atención oportuna para mitigar estas afectaciones.

Así que en este agitado ambiente electoral toca velar por la inclusión de propuestas para adelantar acciones contundentes que ayuden a reparar los daños derivados por la pandemia y que aceleren los procesos de aprendizaje y de bienestar emocional para los estudiantes, debemos regresar a un sistema educativo mejor que el que teníamos. Estaremos atentos a celebrar las iniciativas que se deriven al respecto en nuestro departamento.



Tal vez te gustaría leer esto

Abrir chat
1
¿Necesitas ayuda?
Hola, bienvenido(a) al Diario del Huila
¿En qué podemos ayudarte?