Por: Jose Eustacio Rivera Montes
Cuando parecía que todo estaba dado para que Fico y Petro llegaran a segunda vuelta, ante el desplome de Sergio Fajardo, y un aparente estancamiento de Rodolfo Hernandez, se ve un crecimiento exponencial del ingeniero, en las calles y las redes sociales, pero también se reflejan en las diferentes encuestas con y sin credibilidad. El pasado domingo cierres con desfiles y caravanas se vieron en diferentes municipios del Huila, la gente paga sus afiches, camisetas y micro perforados, hay fervor y entusiasmo en un amplio sector de la ciudadanía inconforme.
Muchos dirán que Hernández empezó muy tarde su carrera política, pero como él mismo lo expresa, se dedicó a su empresa, que llegó a construir miles de soluciones de vivienda que daba la posibilidad de pagar a 100 cuotas, sin bancos y sin entidades financieras. Es un hombre con un gran patrimonio. Fue concejal de Pie de Cuesta, Santander, donde nunca se posesionó ni asistió a ejercer para lo que fue ungido. Como alcalde llegó a tener el 62% de aceptación de la población. Y renuncia a pocos meses de terminar su gobierno ante la muy conocida cachetada al concejal John Claros. Fue un gobernante sin tapujos y con un carácter recio.
Lo que muchos veían como una debilidad, de no haber aceptado ninguna coalición o acuerdo con un sector o líder político, se ha convertido en su principal atractivo. Se proclama y ha sido coherente como un candidato independiente y sin prebenda de quienes quieran llegar. A la adhesión de Ingrid Betancourt, dijo: “llega como una voluntaria más”.
Ha asistido a pocos debates para profundizar en sus propuestas, pero su principal bandera es la lucha contra la corrupción. Bajo su movimiento la liga anticorrupción, se inscribió con un millón de firmas, con la premisa de lógica, ética y estética. Una propuesta y programa sin tantos adornos y abolengos. Es práctico en decir que donara su sueldo para los estudiantes que accedan a créditos del ICETEX para poder ingresar a la educación superior. De eliminar todo tipo de prebendas, viáticos y ayudas a servidores públicos, iniciativa que suena populista, pero que cala en la ciudadanía.
Votó el no, al plebiscito en el 2016, pero ha manifestado que respetará lo acordado, y con el ELN que asesinó su hija en el 2004 y recuerda con gran dolor, ha manifestado que hará un otro si, para evitar largas y desgastantes conversaciones.
Lo comparan con Donald Trump, por su carácter autentico, por los millones en sus cuentas bancarias y que las habla con total particularidad. A sus 76 años se convierte en el principal fenómeno político de las elecciones presidenciales, sin tener unas propuestas y reformas claras en varios sectores, es un serio candidato que pudiera ingresar a segunda vuelta, pero además un candidato que pudiera recoger la inconformidad y el miedo anti Petro para ganar en segunda vuelta. Mientras tanto el domingo estaremos atentos a los resultados de las urnas y el manifiesto popular.
