DIARIO DEL HUILA, ECONOMÍA
Por: Rolando Monje Gómez
El número de familias que han adoptado el gas natural para cocción, desde agosto de 2018 a la fecha, es de 68.250. Desde 1975 a la fecha, la cocción de alimentos con leña ha presentado una disminución del 63%. No solo la leña para cocción es común en zonas apartadas del país, también se utiliza en hogares cerca a grandes centros poblados.
Cerca de seis millones de colombianos aún cocinan con leña aunque en el país más de 16 millones en la actualidad tienen acceso al servicio de energía eléctrica, otros cerca de 11 millones al de gas natural, y un poco más de 3,5 millones al de GLP o gas de cilindro, situación que se presenta, aun teniendo en cuenta las inversiones para mejorar las prestación de solo los dos primeros en el último año superaron los $5 billones. En el territorio nacional, 1,6 millones de hogares recurren a este insumo en gran medida por la falta de infraestructura para llevar electricidad, gas natural y GLP.
Entre agosto de 2018 y septiembre de 2021, 68.250 familias que antes cocinaban con leña, ahora lo hacen con gas, según cifras del Ministerio de Minas y Energía que además señalan que antes de finalizar el 2020 se proyecta que otras 25 mil familias dejen de cocinar con leña.
Aunque la nueva ley de gas permitirá que se implementen nuevos modelos para disminuir el costo del acceso al gas natural en pequeños centros poblados y en viviendas aisladas a familias que todavía usan la leña y carbón a GLP, aún en varias regiones de Colombia, las más apartadas, aquellas donde los combustibles energéticos, como el gas natural, todavía utilizan la leña como insumo para sus preparaciones diarias. Pero no solo la leña para cocción es común en zonas apartadas del país, también se utiliza en hogares cerca a grandes centros poblados.
Una familia de cinco personas consume por año leña de seis a siete árboles, mientras que un cilindro de 100 libras de gas licuado (GLP), que está por encima de los $90.000, solo alcanza para cerca de un mes.
Desde 1975 a la fecha, la cocción de alimentos con leña ha presentado una disminución del 63%, por lo que aún quedan hogares que apelan a este insumo natural, de acuerdo el Plan Energético Nacional (PEN), elaborado por la Unidad de Planeación Minero Energética (Upme).
Según el PEN, la oferta de energía primaria en el país, la componen principalmente combustibles fósiles (carbón y petróleo), con una participación cercana al 77% del total. Por su parte la hidroelectricidad, el gas natural y las fuentes no convencionales de energía renovable (bagazo, biocombustibles y leña) suman el restante 23%, para el 2020 la leña representaba entre un 7% y 8%.
Deforestación y contaminación
La última Encuesta Nacional de Calidad de Vida del Dane, señala que hay cerca de dos millones de hogares que usan fogones abiertos para cocinar, hervir agua o calentar el ambiente, alimentados por combustibles sólidos, como la leña.
Los resultados evidenciaron un acceso casi pleno de los hogares al servicio de energía eléctrica para el total nacional (98,2%). El siguiente servicio más alto en disponibilidad fue el acueducto (89,4%), seguido de recolección de basuras (82,6%), alcantarillado (75,1%) y gas natural conectado a red pública (65,8%).
En las cabeceras la proporción de hogares con acceso a servicios públicos fue superior al 93%, a excepción del gas natural, servicio disponible para el 81,6% de los hogares. En contraste, en centros poblados y rural disperso solo el servicio de energía eléctrica está disponible para un porcentaje de hogares mayor al 90% (92,9%), mientras que el 63,1% accede al servicio de acueducto. Los otros servicios consultados están disponibles para menos de la tercera parte de los hogares rurales: 31,4% en el caso del servicio de aseo, 16,8% en alcantarillado y 14,2% en gas natural.
Según Gasnova, el consumo de leña para ser utilizada en la cocción de alimentos no solamente contribuye a la deforestación, sino también al aumento de enfermedades respiratorias, y a la fecha cerca de seis millones de colombianos la utilizan. Registros de la entidad apuntan que la región Caribe es donde más se consume leña, de la cual se benefician más de 500.000 usuarios, seguido de la zona Central, Antioquia y el Eje Cafetero con más de 450.000 personas, las regiones Oriental y la Pacífica con cerca de 350.000 cada una, y la Orinoquía y la Amazonía con cerca de 300.000.
La venta en cilindros, que es una buena solución para la sustitución, presenta el mayor porcentaje de la distribución y comercialización del GLP, llegando al 72% del volumen total, mientras que las ventas a granel representan el 28% restante. La actividad de distribución y comercialización se lleva a cabo a través de 50 empresas comercializadoras minoristas en cilindros y un total de 37 empresas que distribuyen el GLP mediante tanques estacionarios.
Por este esquema de distribución y comercialización, el GLP llega a todos y cada uno de los 32 departamentos del país, como se indica en la gráfica siguiente, donde se señala además la participación de la demanda de GLP de cada departamento con respecto al total nacional. La demanda de GLP en el Huila frente a las cifras nacionales es del 3%, una 206 mil familias según cifras del Dane reveladas en la más reciente Encuesta Nacional de Calidad de Vida.
