Mientras el mercado de las criptomonedas atraviesa por una desvalorización del 75% del bitcóin, la quiebra de varias plataformas y pérdidas millonarias en el mundo, los pilotos de pruebas de depósito y retiro de recursos que ha adelantado la Superintendencia Financiera con siete de nueve alianzas iniciales, entre entidades vigiladas y plataformas de intercambio, está por terminar, y de expedirse una circular.
Esos ejercicios se adelantan desde comienzos del 2021 en el espacio de pruebas de laArenera (sandbox) de la Superfinanciera con siete de las nueve alianzas iniciales y según la entidad finalizarán próximamente y casi en simultáneo se expedirá una norma para las entidades vigiladas. La norma hace referencia a la evaluación de clientes de las entidades vigiladas cuando se trate de proveedores de servicios de activos virtuales y el fortalecimiento del suministro de información al consumidor cuando haya alianzas con esos proveedores.
De acuerdo con la Superfinanciera, se deberán hacer reportes a la Unidad de Información y Análisis Financiero (UIAF), un sistema de administración del riesgo de lavado de activos, financiación del terrorismo y proliferación de armas de destrucción masiva que atienda los lineamientos del Grupo de Acción Financiera Internacional, contar con condiciones tecnológicas y operativas para realizar la trazabilidad de las transacciones con activos virtuales y amplia información al público en costos, tarifas, estados de cuenta y sus saldos. Además, un sistema de administración del riesgo operacional y de ciberseguridad, con herramientas tecnológicas para gestionar este riesgo.
Especialistas y fuentes del sector como “un criptoinvierno” hace mención a una conjunción de factores que van desde la alta inflación, alza de tasas de interés, derrumbó los precios de las criptomonedas y la quiebra de grandes jugadores y plataformas y la defraudación de la confianza de miles de clientes con la ‘evaporación’ de miles de millones de dólares de cuentas. Felipe Vallejo, jefe de Asuntos Regulatorios y de Política Pública de Bitso, que participó en el piloto con el Banco de Bogotá, menciona que el uso de criptomonedas en remesas ascendió a US$2,1 millones que pasaron a través de Bitso entre enero y septiembre y las cuentas de negocios, compañías e instituciones que usan Bitso como servicio B2B crecieron 73%.
Finalmente, la semana pasada se aprobó en segundo debate en la Cámara de Representantes un proyecto de ley de origen parlamentario que establece requisitos de información y custodia de criptoactivos para las plataformas de intercambio y un marco normativo.
