Diario del Huila

Entre andenes y peatones

Abr 12, 2022

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Carlos Yepes A.

Mi padre siempre me insistía en que la mejor forma de conocer una ciudad es caminándola. Quise entonces reconfirmar si Neiva es realmente una ciudad agradable para caminar teniendo presente los esfuerzos de diferentes administraciones para incentivar esta sana conducta, recordando que han intervenido varios tramos de la ciudad como la Avenida la Toma, la carrera quinta, la calle octava y mucho antes el paseo Jose Eustasio Rivera, entre otros.

Al iniciar el recorrido pudimos evidenciar que las primeras horas del día son utilizadas por ciudadanos, especialmente adultos, para caminar motivados por su salud, así lo evidencia la Avenida la Toma y la calle octava arriba del Santa Lucia Plaza. La zona céntrica de la ciudad sigue siendo visitada por personas que buscan el comercio, los bancos y demás instituciones públicas y de servicios. La carrera quinta pasando el Sena y conectando con el paseo Jose Eustasio Rivera también invita a los neivanos a transitar desde y hacia el centro de la ciudad. La calle octava, de la sexta hacia la plaza cívica, siempre ha tenido alta influencia de peatones.

Al iniciar el día fácilmente nos encontramos con adultos mayores y algunos jóvenes residentes de los sectores aledaños a la Avenida la Toma caminando. Es sin duda un buen espacio a pesar de su suciedad, malos olores (todavía le vierten aguas negras) y la convivencia con los ciclistas. En las noches resulta peligroso por la oscuridad, la mejor cómplice de la cantidad de personas que consumen droga en las bancas ubicadas a lo largo de la misma avenida. Por su parte la carrera octava arriba del Santa Lucía, es aparentemente muy estrecha para albergar a tempranas horas el elevado tráfico de vehículos particulares, buses escolares, ciclistas y peatones, un verdadero reto a la sobrevivencia.

Recorrimos el centro de la ciudad y sigue siendo visitado por gran número de ciudadanos, hemos insistido en la necesidad de descentralizar la ciudad para evitar esa gran carga de ciudadanos visitando el centro para infinidad de diligencias bancarias, notariales, de servicios y comercio que bien podrían prestase en las diferentes comunas y así controlar las ventas callejeras y el moto taxismo, al frenar la necesidad de tener que ir al centro. Venir al centro debería ser para pasear y disfrutar de su oferta gastronómica y turística.

La carrera quinta se convirtió en una gran cantina a cielo abierto sin ningún control sobre todo en la noche, no se respeta el espacio público y se termina caminando entre mesas de personas alicoradas, escuchando música a altos decibeles, capoteando todo tipo de vendedores ambulantes y se finaliza la caminata junto a los consumidores de droga, que se sientan como en sus casas a consumir sin ningún pudor, tanto en la quinta antes de llegar a la toma y el paseo Jose Eustacio Rivera, lo que se constituye en una gran ofrenda al desdén, la pernicia y el desorden.

La calle octava es territorio de nadie, desde el antiguo taurino hacia la iglesia colonial y bajando desde el parque Santander hacia la plaza cívica caminar resulta una odisea entre sombrillas y puestos ambulantes de comidas, ropa, juguetería y demás que terminaron siendo extensiones de muchos almacenes y comerciantes que encontraron la forma de extender sus almacenes hacia las calles, un completo desorden.

Y ni qué decir de otras zonas de la ciudad como la avenida circunvalar, donde la misma Policía les dice a los pocos y osados turistas que es mejor que no la visiten a pie so pena de ser atracados. El barrio el quirinal, donde caminan a diario infinidad de pacientes que acuden a los servicios médicos que allí se prestan, no encuentra andenes sino trampas de cemento, se someten a una verdadera travesía de obstáculos entre jardineras, muros, motos y carros apostados en los andenes sin ningún tipo de control.

Esta cruda y triste radiografía, que seguro se queda corta de nuestra Neiva en materia de andenes y peatones me lleva a reafirmar que, el caminar, como sabiamente me lo sugería mi padre para conocer una ciudad, me ha permitido reconocer que Neiva necesita como muchas veces lo he mencionado -Un Acuerdo Para Vivir Mejor-.

cyepes@hotmail.com

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