DIARIO DEL HUILA, SALUD MENTAL
Escrito por: Mayerly Daza Párraga
Ps. Esp. Directora Fundación ANDA
www.fundacionanda.com
Importantes estudios, han encontrado evidencia de que las personas con más tipos de conexiones también tienden a tener más conductas saludables y emociones más positivas. Esto sugiere que, a mayor apoyo percibido, menor afectación en la salud física y mental.
Las relaciones sociales en la salud mental es un buen indicador de salud, según la literatura, ya sea con pareja, familia, amigos, vecinos, compañeros de trabajo, grupos y otros, pueden contribuir al bienestar, a la biología, a disminuir el estrés, a tener vínculos sociales sólidos, sentimientos de aceptación de los aspectos positivos y negativos de la vida, con sensaciones de utilidad en la colectividad, sentir protección especial en los momentos difíciles, con la percepción de concebir la vida y el mundo con sentido y objetividad; es decir, las relaciones sociales dota al individuo en recursos psicológicos y material para beneficiar la capacidad de hacer frente a los eventos estresantes.
Un estudio realizado por el Dr. Sheldon Cohen, psicólogo de la Universidad Carnegie Mellon, en Pittsburgh, exploró los vínculos entre las relaciones y la salud en 200 voluntarios sanos al virus del resfrío común y los observó durante una semana en un entorno controlado. «Descubrimos que cuanta más diversa era la red social de las personas, es decir, cuantos más tipos de conexiones tenían, era menos probable que desarrollaran un resfrío luego de exponerse al virus», dice Cohen. Desde entonces, él y su equipo han encontrado evidencia de que las personas con más tipos de conexiones también tienden a tener más conductas saludables y emociones más positivas. Esto sugiere que, a mayor apoyo percibido, menor afectación en la salud física y mental.
En este sentido, tener una relación directa con mi entorno social, laboral, familiar, el ámbito emocional, nuestra vida espiritual, intelectual, salud física, económica y ambiental, y creer contar con personas con las que puedo hablar sobre mis problemas, con aquellas que puedo pasar tiempo haciendo cosas, y con personas de las que me pueden proporcionar o proporcionaría ayuda material si fuese necesario, esas interacciones con otros superan cualquier riesgo y tiene efecto positivo en la salud. Pareciera que esas relaciones sociales protegen a las personas en crisis de diferentes patologías, en especial a la depresión y la ansiedad, las cuales, según la OMS, aumentaron en un 25% en el primer año de la pandemia solamente, y que, al influir en los determinantes sociales, en reorganizar los entornos y reforzar los sistemas en los viven y se atiende la salud mental de las personas, contribuye a un mejor futuro para la salud mental en el mundo.
Vale reflexionar también, que las relaciones sociales pueden tener riesgos en la salud, no obstante, los efectos se mitigan al percibir que se cuenta con relaciones y apoyo social, y siguiendo algunas de estas consideraciones, en este artículo los invito a explorar y construir sistemas de apoyo para mantenerse saludable mental y físicamente, que los lleve a ser capaces de afrontar dificultades, a tomar decisiones, a tener soporte emocional, a progresar y a relacionarse positivamente; estas como un atributo de protección, de bienestar optimo, de redes que favorezcan a mejorar la calidad de vida y reforzar la resiliencia.
Construir relaciones saludables y fuertes son importantes a lo largo de vida, según Instituto Nacional de Salud Mental (NIMH), sugiere algunas recomendaciones para conectarse con otros:
- Reconozca cómo influyen sobre usted otras personas.
- Comparta sus sentimientos honestamente.
- Pida aquello que necesita de los demás.
- Escuche a los demás sin juicio o culpa. Sea cuidadoso y empático.
- Sea respetuoso cuando esté en desacuerdo con otros. Los conflictos no deben convertirse en ataques personales.
- Evite ser excesivamente crítico, arrebatos de ira y comportamiento violento.
- Espere que los demás lo traten con respeto y honestidad a cambio.
- Comprométase. Intente llegar a acuerdos que funcionen para todos.
- Protéjase de las personas violentas y abusivas. Establezca límites con otros. Decida lo que esté y no esté dispuesto a hacer. Está bien decir que no.
- Conozca las diferencias entre las formas saludables, no saludables y abusivas de relacionarse con los demás.
Ahora, este fin de semana en medio de las elecciones presidencial de Colombia de 2022 y de la conmemoración del día del padre, quisiera dedicar un espacio para visualizar la importancia de las relaciones y los vínculos de los padres con sus hijos e hijas, dirigida hacia una crianza responsable, participativa y consciente en el ejercicio de la paternidad, para transitar el camino de la corresponsabilidad de los hombres frente a los cuidados y figuras fundamentales de apego para sus hijos e hijas, además de la importancia de la participación de los varones en las tareas domésticas y la crianza, ya que los padres asumen implícitamente, como resultado de la trayectoria cultural e institucional, que su principal función como padres es la de ser proveedores económicos más que cuidadores parental, dirigido hacia un modelo más igualitario. Cada padre e hijo es único. Ser sensible y receptivo a sus hijos puede ayudarlo a desarrollar relaciones sanas y positivas juntos.
Así, los entornos de crianza, cuidado y aprendizaje de apoyo pueden ser enormemente protectores de la salud mental futura (Informe mundial sobre salud mental: transformar la salud mental para todos. Panorama general, junio 2022).
