El sector cafetero está atravesando un momento histórico positivo para las 560 mil familias, por el incremento que ha tenido el precio internacional de este grano, durante los últimos dos meses. A pesar del impacto negativo que este importante renglón de la economía colombiana por la aplicación errada de los instrumentos de la política económica por parte del gobierno nacional, que no se compadece con la irracional importación de alimentos que superan los 14 mil millones de toneladas anuales, manteniendo una competencia agresiva y desleal en materia de precios. Los costos de producción se encuentran muy elevados, la alta carga tributaria, un precio del dólar que bordea los cuatro mil pesos, servicios públicos muy altos, entre otros factores, que, junto con el cambio climático y la inseguridad rural, están permeando negativamente la rentabilidad de los hombres del campo, que son los que les permiten a los colombianos, tener asegurada la provisión alimentaria de las familias.
Las familias cafeteras en Colombia se encuentran satisfechas nuevamente porque el precio internacional del grano se ha incrementado significativamente, en la bolsa de valores de Wall Street de Nueva York al cotizarse el día anterior en 2,3165 dólares la libra de café. En Colombia el precio de referencia corresponde a $2.110.000 la carga pagada por la Federación Nacional de Cafeteros. Pero, unos nubarrones se ciernen un panorama incierto, que están afectando ostensiblemente la rentabilidad de los agricultores porque están ocasionando un incremento de los costos de producción por los insumos importados.
Cuando empezaban a soplar buenos vientos durante los últimos meses, por la recuperación económica que ha presentado el sector productivo a nivel nacional, se empieza a vislumbrar un panorama incierto provocado por la crisis mundial de contenedores, que tiene semiparalizado el suministro de bienes, a los principales mercados mundiales. Particularmente en nuestro país, la economía nacional, el sector productivo, se encuentra bastante afectado porque no están llegando oportunamente los pedidos internacionales. Las rupturas en las cadenas de suministro, provocada por la crisis de contenedores, en medio de la reactivación y ad-portas de las festividades navideñas, están generando un tsunami de expectativas para el sector productivo del país.
Esta crisis global de contenedores tiene en máxima alerta a muchos otros sectores económicos que se ven afectados por la escasez de rutas de transporte, con fletes que se han multiplicado afectando la disponibilidad y los costos de los productos. Mediciones de Analdex muestran que el costo de los fletes pasó de 555 dólares por transporte en container, antes de pandemia, a 2.500 dólares por cada uno, durante el 2020 y ahora en esta crisis ha subido a 22.000 dólares por container. Por este motivo, lo anterior puede generar una disminución en los niveles de rentabilidad de este sector que le garantiza la seguridad alimentaria de la sociedad colombiana.
