Desde esta tribuna de opinión, condenamos este accionar violento de estas organizaciones que están generando horror y miedo en las familias colombianas. La sociedad huilense se encuentra consternada por el atroz crimen a mansalva cometido por un grupo armado en el municipio de Suaza durante el fin de semana que acaba de terminar, donde fueron asesinadas cuatro personas en diferentes sitios de esta localidad. De acuerdo con la información suministrada por las autoridades, fueron obra de las disidencias de las Farc, de acuerdo con los panfletos dejados por esta organización narcoterrorista. Se desconocen los móviles de este hecho que enluta a los habitantes de este importante municipio del suroriente del departamento.
Dadas las circunstancias y la coyuntura actual como se presenta el conflicto armado en el país, que cada vía crece y que desafortunadamente es alimentado por el flagelo del narcotráfico que es un problema trasnacional y que supera el accionar propuesto por el actual gobierno, será muy difícil contrarrestar esta otra pandemia que corroe los cimientos de la democracia colombiana. Se convierte en una mayúscula preocupación para el ejecutivo nacional. No se puede bajar la guardia. Mientras exista demanda de narcóticos en el mundo, habrá oferta para satisfacer este mercado detestable que está afectando y destruyendo a las nuevas generaciones en el mundo. Solamente en Estados Unidos, han ocurrido más de 300 masacres durante el 2023. En el país han ocurrido 69 masacres en el periodo comprendido entre el 1 de enero y 30 de septiembre de 2023, de acuerdo con el Instituto de Estudios para El Desarrollo y la Paz (Indepaz) de Colombia.
Consideramos que estos eventos no pueden volver a seguir presentando en nuestro territorio. Igualmente, el gobierno nacional debe desarrollar una agresiva inversión social y de infraestructura para mejorar las condiciones de bienestar de las familias residentes en estas zonas, que son noticia cuando suceden estos hechos trágicos. El Estado tiene una tarea para volver productivas las regiones afectadas por el conflicto en el territorio nacional y para ello, se deben emprender acciones preventivas para evitar que vuelvan a suceder hechos parecidos.
