La sociedad mundial está recibiendo masivos mensajes a través de las redes sociales y de los medios de comunicación, los cuales se emiten en la mayoría de las veces sin ningún filtro y sin responsabilidad alguna, que están afectando la verdadera realidad de los acontecimientos que se generan al interior de ésta. Hoy en día la responsabilidad social de los medios de comunicación, se orientan, ante todo, para defender los ideales democráticos, buscando adquirir un sentido de libertad transmitidos en ellos, no de prevalencia de intereses personales o de grupos determinados, sino defendiendo siempre los intereses colectivos. Desafortunadamente algunos medios, se soportan en análisis empíricos, producto de investigaciones descriptivas, que narran solamente las interacciones conflictivas e intimas de las personas sujetas a los hechos ocurridos.
De acuerdo con lo anterior, es cuando se originan los debates hirsutos, los cuales se ponderan entre el derecho a la comunicación y los derechos inalienables de la intimidad de las familias colombianas. Las proporciones y las desproporciones ocasionan daños irreparables en su entera dimensión, con lo cual se vulnera el derecho a la intimidad con la aparición de otro sin número de daños emergentes y colaterales. Hemos sido reiterativos, que el derecho al buen nombre es sagrado y obliga a los que manejan la información, en especial a los periodistas a ponderar y moderar el proceso de obtención de la información hasta su salida al público en general. Por lo anterior, es necesario avanzar en el control y monitoreo de la ética de los comunicadores al respecto del manejo de información íntima para que la noticia no afecte las personas que hacen parte de ella. Pero de acuerdo con algunos sectores de la opinión pública, reconocen que se sigue habiendo una deuda con el periodismo. Se debe entender el periodismo como una institución democrática que tiene derecho a la libertad de expresión.
Cada día el mundo se encuentra interconectado a través de las Tics, permitiendo conocer al instante los acontecimientos y los sucesos acaecidos en el diario acontecer ciudadano. Pero la importancia de las noticias se da, porque son generadas por seres humanos, que son los que contribuyen a través a través de la libertad de expresión a difundirlas y que contribuyen decididamente al fortalecimiento de las instituciones democráticas de un país, cuando el Estado protege este derecho inalienable, que posee la población de ser informado veraz y objetivamente.
Pero cuando sucede lo contrario, empieza la mordaza a la prensa y a los demás medios de comunicación que se deben someter a los mensajes dictatoriales de los dirigentes que quieren imponer su voluntad, a través de una ideología política, que en los tiempos modernos van en contravía de las nuevas tendencias mundiales del dialogo, solidaridad, respeto por los derechos humanos, pensamiento, libertades y demás valores que enaltecen la dignidad humana.
