El menor aprehendido fue entregado a las autoridades competentes para el restablecimiento de sus derechos, mientras que una mujer fue capturada por orden judicial en operativos que combaten el delito de extorsión.
Unidades del Gaula Militar de la Novena Brigada y su componente del CTI han logrado resultados en la lucha contra el delito de extorsión, que atenta contra la libertad personal, la integridad física y el patrimonio económico de las víctimas.
Estas acciones han culminado en la aprehensión de un menor de edad y la captura de una mujer, ambos presuntamente involucrados en actividades extorsivas.
La primera acción tuvo lugar en el municipio de Pitalito, Huila, donde las autoridades tenían conocimiento de un intento de extorsión dirigido hacia un ganadero local. Según la información recopilada, los extorsionistas habían citado a la víctima y le exigían una suma de 30 millones de pesos, parte de los 100 millones que pretendían obtener.
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En este contexto, el menor aprehendido y dos individuos más, previamente se habrían presentado en la finca de la víctima, haciéndose pasar por supuestos miembros de un grupo armado ilegal. Bajo amenazas, habrían exigido la cuantiosa suma de dinero a cambio de garantizar la seguridad del ganadero y su familia, así como la continuidad de sus actividades.
Durante la entrega del dinero, cuando el presunto receptor escuchó la proclama del Ejército, exhibió un arma de fuego y resultó herido en una pierna en las circunstancias del enfrentamiento. Más tarde, en el centro médico del municipio, se identificó que se trataba de un menor de 16 años que al parecer estaba siendo instrumentalizado para llevar a cabo actividades intimidatorias y el cobro de extorsiones.
Neiva
En otra operación, realizada en el barrio Centro de Neiva, unidades del Gaula Militar hicieron efectiva una orden de captura contra una mujer que había sido condenada a seis años y un mes de prisión por los delitos de extorsión agravada y enriquecimiento ilícito.
Los hechos que llevaron a su captura se remontan al 28 de mayo de 2021 en Manizales, cuando la víctima, un campesino de la región, recibió una llamada de un individuo que afirmaba ser el comandante de las Águilas Negras. Este individuo le solicitó colaboración financiera para una supuesta «limpieza social» y amenazó con atacar a su familia si no cumplía con sus demandas.
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