Gloria Camargo
Se acerca la fecha límite para que los empleadores paguen la prima de mitad de año a sus trabajadores, una prestación muy esperada por los colombianos que brinda alivio a sus finanzas personales, especialmente en medio del aumento de la inflación y las tasas de interés.
Todos los trabajadores contratados bajo un contrato laboral diferente al de prestación de servicios tienen derecho a recibir el pago de la prima, que equivale a 15 días de salario por cada semestre trabajado. Según los cálculos del Área de Estudios Económicos de Asofondos, esta prestación beneficiará a 10 millones de trabajadores del sector público y privado, inyectando cerca de $12 billones a la economía en un momento de desaceleración económica esperada para este año.
Los expertos esperan que este monto contribuya a dinamizar sectores como el turismo y los restaurantes, justo durante las vacaciones de mitad de año. «Normalmente, la percepción de bienestar del consumidor aumenta gracias a contar con este recurso de manera anticipada, lo cual mejora las dinámicas con las que comienza el segundo semestre del año. En un entorno de desaceleración económica, esto puede impulsar la economía, especialmente en sectores relacionados con el ocio, como restaurantes, vida nocturna y turismo», señaló Alexander Ríos, analista y fundador de Inverxia.
Camilo Pérez, jefe de investigaciones económicas en el Banco de Bogotá, destacó que «el pago de la prima es un ingreso adicional que reciben los hogares y que impulsa su consumo». Además, enfatizó la importancia de promover la educación financiera para que las personas consideren el ahorro como una opción relevante en momentos de desaceleración económica.
Un sondeo realizado por Fenalco reveló que el 75% de las personas planifica cómo utilizará su prima de servicios, mientras que el 25% restante simplemente destina estos recursos a sus necesidades inmediatas. Casi el 59% de los encuestados indicó que destinará estos recursos al pago de deudas, mientras que el 12% los invertirá en educación, el 9% los utilizará para viajes o vacaciones, el 7% los destinará a compras de vestuario o calzado, y solo el 5% planea ahorrar para proyectos futuros. Otros gastos mencionados en menor medida incluyen arreglos en el hogar y planes de ocio y diversión.
En cuanto al uso de estos recursos, los expertos recomiendan ahorrar e invertir una parte. «Desde las finanzas personales, hay dos recomendaciones básicas para el uso de la prima. En primer lugar, amortizar deudas para limitar el pago de intereses futuros, lo cual liberará capacidad de consumo o ahorro a largo plazo. En segundo lugar, invertir parte de estos recursos a tasas que superen la inflación, ya que en tiempos de fenómenos inflacionarios pueden surgir oportunidades de inversión con bajo riesgo y tasas interesantes a mediano y largo plazo», explicó Ríos.
