Alias Jota habría ordenado varios asesinatos selectivos durante el último año para imponer los lineamientos fijados por la estructura criminal y demostrar control ilegal en algunas zonas.
La Fiscalía General de la Nación imputó a Jhon Jaime Ramírez, alias Jota, señalado cabecilla de la estructura Adán Izquierdo de las disidencias de las Farc, como presunto responsable de una ola de homicidios en Valle del Cauca.
Interceptaciones a las comunicaciones de varios integrantes de la estructura criminal y otros elementos de prueba dan cuenta de varios asesinatos que habrían sido ejecutados por instrucción directa de alias Jota, y en atención a los lineamientos definidos para ejercer control ilegal sobre algunas áreas en el sur occidente del país.
En ese sentido, se han acreditado tres eventos distintos que dejaron cuatro víctimas. El primero, sucedió el 31 de julio de 2021, en la vereda Monterrey, en jurisdicción de Guarí. En esa oportunidad fueron asesinados dos adultos mayores de 65 y 68 años.
Los demás eventos sucedieron en zona rural de Tuluá. En uno, registrado el 17 de septiembre de 2020, en el sector denominado Barragán, murió un hombre de 27 años; y en el otro, perpetrado el 5 de febrero de 2022, en el corregimiento Monteloro, fue asesinada una mujer a quien señalaron equivocadamente de ser informante de las autoridades.
Una fiscal de la Dirección Especializada contra las Organizaciones Criminales imputó a alias Jota el delito de homicidio agravado en calidad de determinador.
El procesado permanece privado de la libertad en la cárcel de Popayán (Cauca), luego de ser judicializado en mayo del año en curso, junto a otras seis personas, por concierto para delinquir, y fabricación, tráfico y porte de armas, municiones de uso restringido, de uso privativo de las Fuerzas Armadas o explosivos.
