América Latina representó el 13% de los ataques y es la quinta región del mundo más afectada por los cibercriminales. El año pasado Brasil, México y Perú fueron los países más golpeados por ese flagelo en la región. Además, el Ransomware (secuestro de información) fue el principal tipo de ataque en 2021 con el 29% de los casos.
Precisamente, para ejemplificar la forma como trabajan los hackers (cibercriminales) IBM realizó en Boston (Estados Unidos) un simulacro de ciberataque a la compañía financiera Bane & Ox (nombre ficticio) en el IBM X-Force Command Center. Pese a que era un ejercicio con elementos creados a partir de casos reales, se demostró cómo desde cualquier sitio del mundo se cometen este tipo de delitos, con la ayuda muchas veces de teléfonos satelitales o celulares encriptados para evitar el rastreo.
Así las cosas, la multinacional presentó el estudio ‘Costo de una violación de datos 2022’, una perspectiva de los factores que pueden aumentar o ayudar mitigar el costo creciente de las filtraciones de datos. En su decimoséptimo año, esta investigación, realizada de forma independiente por Ponemon Institute, y patrocinado, analizado y publicado por IBM Security, se estudiaron 550 organizaciones afectadas por las filtraciones de datos ocurridos entre marzo de 2021 y marzo de 2022.
Las infracciones ocurrieron en 17 países y regiones, además, en 17 industrias diferentes y se entrevistaron a más de 3.600 personas de organizaciones afectadas. El 21% de los ataques en la región fueron BEC (Compromiso de correos electrónicos empresariales o Business E-mail Compromise). Adicionalmente, el 21% de los ataques en América Latina fueron robo de credenciales y el phishing fue el vector de infección más común utilizado en la región, con el 47% de los ataques, indica el estudio. La explotación de vulnerabilidades provocó el 18% de los incidentes en la región.
Según Mike Barcomb, director ejecutivo del IBM Security Command Center, por muchos años, la industria financiera fue la más atacada en Latinoamérica y el mundo, pero en 2021 la manufactura pasó a ser la industria más atacada, seguida por el sector mayorista y minorista y, en tercer lugar, el sector financiero y de seguros.
Finalmente, el estudio señala que los consumidores pagan el precio de los costos de filtración. El costo promedio en América Latina aumentó casi 15% frente al 2020 y globalmente, el 60% de las empresas aumentó los precios de los productos y/o servicios, lo que contribuyó al aumento general de bienes a nivel mundial.