DIARIO DEL HUILA, HUILA
Con un homenaje póstumo a la gestora social del departamento del Huila, Clarita Moreno de Dussán, se dio inicio al evento de apertura de la edición 56 de la Feria Nacional Artesanal de Pitalito.
Autoridades civiles, militares y eclesiásticas participaron del evento que dio inició de forma oficial a los 5 días del evento artesanal por excelencia en el departamento del Huila y el sur de Colombia.
A la par de la muestra artesanal, se adelanta también la agenda académica y cultural para el deleite de los visitantes.
Cestería, cerámica, bisutería, artesanías en cacho, tejidos, bordados y mucho más, son expuestos por sus mejores representantes, quienes han venido desde diferentes rincones del país al evento.
Son muchas las historias de vida que se tejen dentro del bello oficio artesanal, como Celvina Ramírez, maestra del sombrero Suaza, quien desde los 7 años aprendió el arte y hoy que cumple sus 76 años, lo sigue ejerciendo con pasión.
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“Yo estaba estudiando y no me gustaba el estudio, me gustó fue el sombrero; seguí aprendiendo el arte por mis tías y mi abuela que eran las que me enseñaban y mi mamá. Cuando tenía 10 años, hice el primer sombrero con todo lo que mi mamá desechaba, lo que no le servía a ella, yo lo recogía. Ese sombrero lo vendí en 20 centavos y eso me sirvió para comprarme una muda de ropa completa”, contó con orgullo Celvina.
Luego de casarse y enviudar trece años después, encontró en la fabricación del sombrero la mejor manera de sacar adelante a sus 9 hijos. “Yo los crié haciendo sombreros de día y de noche, trabajando duro. Cuando mis hijas empezaron a entender que era el trabajo, yo las enseñé y todas aprendieron; nosotros nos hacíamos cuatro sombreros semanales”, agregó.
Contó con orgullo que ha participado toda su vida de la Feria Nacional Artesanal y de todo lo que ha evolucionado la misma. “Cuando nosotros comenzamos a venir, era una casa y lo demás era un solar. Teníamos un plástico debajo de un palo y a mí me tocó alquilar unas tablas para exhibir los sombreros y me fue bien y desde ahí me hice conocida acá con la Cámara de Comercio”, puntualizó.
Actualmente gracias a su talento, ha visitado países como República Dominicana y ciudades de Colombia como Cartagena, Barranquilla, Santa Marta, Medellín, Cali, entre otras, convirtiéndose en la embajadora del sombrero Suaza, un producto con denominación de origen.