El presidente de Colombia integró la larga lista de mandatarios que fueron recibidos en reuniones rápidas por el nuevo jefe de Estado de Brasil.
Luego de posesionarse, Luiz Inácio Lula da Silva empezó a desarrollar una apretada agenda como máximo mandatario de los brasileños, lo que empezó recibiendo a los gobernantes que asistieron a su toma de poder.
Fue así como en la mañana de este 2 de enero, Da Silva cruzó palabras en encuentros consecutivos con el rey Felipe VI, de España; Wang Qishan; vicepresidente de China; Luis Arce, presidente de Bolivia; Umaro Sissoco Embaló, de Guinea-Bisáu; Alberto Fernández, de Argentina; Guillermo Lasso, de Ecuador; y Gustavo Petro, de Colombia; entre otros.
Lula, que por tercera vez se pone la cintilla presidencial, aprovechó que 20 jefes de Estado asistieron a su posesión –la cifra más alta para este tipo de eventos en el país de la samba– para estrechar lazos con todos ellos y optar por tener una labor de liderazgo en la región.
El presidente de Colombia publicó una serie de fotografías en sus redes sociales que dan cuenta del encuentro sostenido entre los 2 líderes izquierdistas.
Petro estuvo mostrando una marcada sonrisa en todo momento y exhibiendo gestos de admiración hacia el veterano mandatario brasileño.
Fue así como consignó en un escueto trino los temas que fueron tratados en el respectivo diálogo, como el cuidado de la naturaleza, la paz, la guerra contra el narcotráfico y asuntos de carácter energético.
“Un gran pacto para salvar la selva amazónica en favor de la humanidad”, fue su primera sentencia.
Y detalló que la alianza entre ambos se encaminará “hacia un cambio de la política antidrogas; un Brasil garante de la paz en Colombia y el estudio de la interconexión eléctrica de las Américas con fuentes de energías limpias”.
