“Los resultados pesan más que la retórica”, le dijo el presidente salvadoreño Nayib Bukele a Gustavo Petro.
Los presidentes de Colombia y El Salvador, Gustavo Petro y Nayib Bukele respectivamente, han cruzado mensajes en Twitter después de que Petro calificara la megacárcel inaugurada por Bukele como un «campo de concentración» para más de dos mil pandilleros trasladados allí.
En respuesta, Bukele ha defendido la efectividad de la medida, afirmando que «los resultados pesan más que la retórica». El presidente salvadoreño ha destacado que su gobierno ha logrado bajar los índices de homicidios en el país centroamericano y ha deseado que Colombia pueda hacer lo mismo.
Petro, por su parte, ha reiterado su oposición a la creación de estos centros de reclusión, que considera «dantescos». En lugar de eso, ha afirmado que su gobierno quiere seguir el camino de la educación, creando más colegios y universidades para prevenir la violencia y la delincuencia.
El cruce de mensajes entre los dos líderes ha generado debate en ambos países, con opiniones divididas sobre la eficacia de la megacárcel y la estrategia de cada gobierno para combatir el crimen y la violencia.
Desde Colombia Petro le ha apostado a la llamada paz total, medida que ha generado ciertas críticas por parte de la oposición.
