La dificultad de contar con agua potable en Obando es de más de cuarenta años. Los pobladores se unieron y con esfuerzos construyeron un acueducto veredal, hace 40 años, con recursos propios, asegurando la arborización de la zona de captación que ahora ha sido afectada por un arboricidio. Claman por soluciones definitivas
“En Obando según datos que me han suministrado los integrantes de la Junta del acueducto veredal, que tiene más de cuarenta años, se está presentando un ecocidio en zona de reserva del acueducto que con esfuerzo han construido”, dijo Emiliano Realpe Puentes, un joven oriundo de esta localidad estudiante de relaciones internacionales en la ciudad de Medellín, se está presentando un ecocidio.
Según las denuncias en la parte alta de captación del acueducto veredal que construyeron con recursos de la comunidad, una o dos personas con el propósito de sembrar aguacate, tumbaron los árboles que recién habían sembrado en media hectárea de la reserva que ellos adquirieron para garantizar el buen estado de la cuenca de la quebrada la Cascajosa de la que se surten.
“El miércoles de la semana pasada fui informado por los miembros de la Junta de Acción Comunal de un ecocidio que se vienen presentando en la cuenca en la parte alta y además de una quema que involucró buena parte de la extensión de la reserva”, comentó Realpe.
La quema fue la que afectó la zona que se había reforestado hace poco en una acción que se emprendió desde el Consejo departamental de Juventudes en coordinación con la JAC, en abril de 2022, con apoyo de la alcaldía de San Agustín, La Cam y el trabajo de toda la comunidad.
“Esa quema al parecer la realizó un vecino a la cuenca quien de manera violenta corta los arbolitos recién sembrados y otros que llevaban nueve años y procede a la quema que es lo que alerta a toda la comunidad”, agregó Realpe.
De inmediato hacen la denuncia pública a través de las redes para que todos se unan en torno a esta problemática.
Otros problemas adicionales
Pero no solo lo que los alertó la semana pasada ha venido afectando la reserva, existe una problemática de deforestación masiva desde hace varios años, desde la vereda Peñas Blancas, en donde vienen aplicando en cultivos toda clase de agroquímicos que son dañinos y están contaminando todas las fuentes hídricas que surten el acueducto veredal de Obando.
“Hace un tiempo los miembros de la Junta alertaron en una reunión a la comunidad que podrían realizar una inspección con la corporación ambiental regional y la oficina de desarrollo agropecuario para conocer si realmente el agua que consumen es apta para el consumo humano”, porque las características del agua que consumen no lo son, agregó Emiliano.
En una reunión que se realizó el viernes pasado con el alcalde y la autoridad ambiental local en la que el mandatario local les ofreció todo el respaldo, se acordó una visita a la zona, para hoy con funcionarios de la Cam, el Dama y con acompañamiento de la comunidad.
Emiliano Realpe, quiso dejar presente que el acueducto no es un acueducto convencional, bien estructurado, todo se ha hecho con la comunidad, que es la que ha asumido las riendas de la construcción y mantenimiento de ese acueducto veredal, “no hemos tenido asesoría o acompañamiento de entidades como la alcaldía, la gobernación.
¿La incógnita que surge es por qué? Existiendo entidades como Aguas del Huila, para poner un ejemplo del orden departamental u otras, no ha existido el interés de apoyar a este centro poblado en el que viven unas 400 a 500 personas.
La Constitución política de Colombia establece que; Deberá ser posible tener acceso al agua dentro o cerca de cada hogar, centro educativo y lugar de trabajo. Los Estados deben garantizar que las instalaciones y servicios de agua sean seguros para el acceso, y atender las necesidades de género, cultura, ciclo de la vida y privacidad.
La Junta del acueducto
Como toda comunidad que se organice, constituye una junta directiva, así sucede en el acueducto veredal de Obando, centro poblado del municipio de San Agustín.
Tito Muñoz, quien es miembro del cuerpo de bomberos voluntarios del municipio, es integrante de la junta del acueducto y, por lo tanto, habla con propiedad de algo que conoce, que ha ayudado a mantener por más de 23 años como única posibilidad de tener agua potable en sus hogares.
Don dos las bocatomas del acueducto, en la parte alta de la vereda y es donde se les está presentando un grave problema de contaminación del agua, que de por si no está en las condiciones aptas para el consumo humano.
“En la parte alta en donde se encuentran las bocatomas, se está sembrando aguacate y para este propósito sin mediar ningún tipo de negociación o acuerdo, han procedido a deforestar, lo que sumado a los químicos que utilizan para tratar las tierras, caen a las cuencas que abastecen el acueducto y esto nos está perjudicando”, dijo el dirigente.
La llegada de nuevos colonos a una zona que es considerada reserva, prácticamente bosque virgen se viene generando desde hace unos tres años para acá, contó, además, Tito Muñoz.
Como se dijo, son dos fuentes de abastecimiento, con las que cuentan para el abastecimiento del acueducto, en la primera ya sucedió hace unos tres años y en la última es que se les presentó lo de la semana pasada.
“En esta oportunidad, con el mismo propósito de sembrar aguacate, llegó un señor y deforestó un terreno, que es una zona de reserva de propiedad nuestra, generando contaminación y por eso levantamos nuestra voz de protesta para que estas malas prácticas no se permitan, que haya un control de las autoridades correspondientes”.
La petición está encaminada a las autoridades civiles y ambientales tanto a nivel del municipio como del departamento para que se aclare si quienes están cometiendo estos ecocidios, cuentan con los permisos o licencias correspondientes.
“La verdad no entendemos por qué están permitiendo tantas talas en lo que son selvas vírgenes en donde no había llegado la mano del hombre y de un momento para otro llegan esas personas sin saberse si tienen los permisos y avales correspondientes, pero la verdad es algo impresionante lo que está sucediendo”, agregó Muñoz.
En el esfuerzo que se ha hecho para contar con una cuenca abastecida, los constructores del acueducto, compraron 8 hectáreas que han estado reforestando permanentemente y en la misma se hizo una reforestación el año pasado en las llamadas “Mingas verdes”.
El tema es bastante preocupante, porque les rozaron y quemaron el cuarto de hectárea que recién se había arborizado y parte de la reserva que tenían algunos árboles con ocho y hasta 20 años.
El acueducto y su infraestructura
Muñoz, contó a Diario del Huila, sobre las condiciones del único acueducto veredal con el que cuentan y que ha sido producto del esfuerzo de ellos como comunidad, en la consecución de los recursos, realización de las obras y el mantenimiento.
“El acueducto es algo que ha sido hecho por la comunidad, no cuenta con planta de tratamiento, se construyó inicialmente para suministrar agua a unas 35 personas y actualmente tiene unos 235 usuarios, solo en el centro poblado, pero se acerca a 500 si se tienen en cuenta la zona de influencia en la zona rural aledaña, lo que lo ha convertido en demasiado precario para lo que necesitamos”
El acueducto es tan rudimental, que solo cuenta con los tubos de captación, las bocatomas, un tanque de almacenamiento y el agua llega directamente a las casas sin tratamiento alguno.
Esto los ha llevado a pensar en medio de esta lucha por años en la necesidad de un nuevo acueducto, pero no han podido encontrar, quien los oriente y menos, quien se comprometa en un proyecto con todas las especificaciones requeridas para brindar agua potable de calidad a los habitantes del centro poblado.
“Hemos intentado por los lados de la alcaldía y otros, pero no hemos encontrado la ayuda necesaria, por acá en el campo es bien difícil de un lado tener los recursos y de otro la facilidad para el desplazamiento para llegar a donde alguien que nos oriente, que nos diga cojan por este camino”, agregó Muñoz.
Los recursos que recaudan son solo para mantenimiento del acueducto y no alcanzan, no cuentan con solvencia económica como para invertir en funcionarios o asesores, por eso al agua no se le hace ningún tipo de tratamiento, va a las bocatomas, de estas a los tanques y de estos directamente a la llave.
“Es la cruda realidad que nos toca vivir y afrontar, acá nos toca así”, reflexionó el integrante de la Junta y del cuerpo de bomberos.
La reunión de este lunes 13 de marzo
Toda la comunidad del centro poblado de Obando está pendiente y hará el acompañamiento a la comisión que llegará en las horas de la mañana de hoy para hacer presencia en la zona a los enviados de la Cam y del Dama, con presencia de la policía de carabineros, “no sabemos que otros funcionarios lleguen, a ver este problema tan grave que tenemos acá”, sostuvo el bombero Muñoz.
La reunión es resultado de las conversaciones previas que se adelantaron el viernes anterior a instancias del alcalde Luis Fernando Llanos, quien se comprometió a mediar para la presencia de la comisión y está pendiente de los resultados de la visita a la zona.
La cruda realidad planteada desde el centro poblado de Obando en el municipio de San Agustín, es la que se vive en muchas regiones de Colombia en donde las comunidades tienen que vivir sin agua potable, un derecho fundamental contemplado en los derechos humanos y en la Constitución, pero al parecer no en la mente y menos en la conciencia de quienes toman las decisiones sobre el manejo ambiental y el uso de las cuencas en este país.