Mujeres de la comuna 6 declararon que en Neiva no se está cumpliendo con las acciones incluidas en la ruta de atención integral para las víctimas de violencias de género.
DIARIO DEL HUILA, COMUNIDAD
Por: Angélica Andrade Quimbaya
De acuerdo con las insistentes estrategias promovidas desde el Ministerio de Salud y Protección Social en pro de contribuir con la reducción de las violencias de género, se viene incentivando el desarrollo de las tácticas incluidas en la ruta de atención integral para víctimas de violencias de género, entendida como el grupo de labores articuladas que den respuesta a las obligaciones normativas para asegurar el amparo y la defensa a favor de las víctimas, su rescate, rehabilitación y restitución a las que haya lugar de los derechos.
En este sentido, se incluyen las labores endógenas de cada entidad en las que es imprescindible el abordaje integral a las víctimas, según su injerencia, capacidad, competencia y coordinación de las mediaciones interesectoriales y multisectoriales a las que haya lugar, en las que se tenga en cuenta que cada caso es individual, particular y único y está asociado a las condiciones propias de las presuntas víctimas, por la forma de violencia de género presentada, por la opción, portafolio de servicios, disponibilidad y disposición institucional en las regiones. Es así como la ruta integral e intersectorial se edifica a partir del contexto y características locales, incluyendo a todas las entidades para la cooperación en términos de salud, justicia y protección, en las que se cumpla con los hallazgos evidenciados tras los estudios, análisis, investigaciones y diagnósticos de la situación y de las determinaciones sociales en dichas localidades, comunas y poblaciones.
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En lo que respecta al cubrimiento integral de las violencias de género, desde el Ministerio de Salud y Protección Social se ejecutan actividades para el refuerzo interinstitucional y la ayuda técnica a las regiones, los departamentos, los distritos, municipios y zonas priorizadas para la cimentación y el establecimiento de rutas intersectoriales para la completa e integral vigilancia, atención y promoción a las víctimas de violencias de género en todas sus dimensiones, tal como se indica en la Ley 1257 de 2008, en la que se “dictan normas de sensibilización, prevención y sanción de formas de violencia y discriminación contra las mujeres, se reforman los Códigos Penal, de Procedimiento Penal, la Ley 294 de 1996 y se dictan otras disposiciones”, señalando en su Artículo primero que “La presente ley tiene por objeto la adopción de normas que permitan garantizar para todas las mujeres una vida libre de violencia, tanto en el ámbito público como en el privado, el ejercicio de los derechos reconocidos en el ordenamiento jurídico interno e internacional, el acceso a los procedimientos administrativos y judiciales para su protección y atención, y la adopción de las políticas públicas necesarias para su realización”.
Sumado a esto, en el Artículo 2 de la mencionada ley, se define el concepto de violencia contra la mujer, rezando que “Por violencia contra la mujer se entiende cualquier acción u omisión, que le cause muerte, daño o sufrimiento físico, sexual, psicológico, económico o patrimonial por su condición de mujer, así como las amenazas de tales actos, la coacción o la privación arbitraria de la libertad, bien sea que se presente en el ámbito público o en el privado” y que se comprenderá como daño contra la mujer: “Para interpretar esta ley, se establecen las siguientes definiciones de daño:
· Daño psicológico: Consecuencia proveniente de la acción u omisión destinada a degradar o controlar las acciones, comportamientos, creencias y decisiones de otras personas, por medio de intimidación, manipulación, amenaza, directa o indirecta, humillación, aislamiento o cualquier otra conducta que implique un perjuicio en la salud psicológica, la autodeterminación o el desarrollo personal.
· Daño o sufrimiento físico: Riesgo o disminución de la integridad corporal de una persona.
· Daño o sufrimiento sexual: Consecuencias que provienen de la acción consistente en obligar a una persona a mantener contacto sexualizado, físico o verbal, o a participar en otras interacciones sexuales mediante el uso de fuerza, intimidación, coerción, chantaje, soborno, manipulación, amenaza o cualquier otro mecanismo que anule o limite la voluntad personal. Igualmente, se considerará daño o sufrimiento sexual el hecho de que la persona agresora obligue a la agredida a realizar alguno de estos actos con terceras personas.
· Daño patrimonial: Pérdida, transformación, sustracción, destrucción, retención o distracción de objetos, instrumentos de trabajo, documentos personales, bienes, valores, derechos o económicos destinados a satisfacer las necesidades de la mujer.
Comunidad
Tras el contexto normativo presentado, Diario del Huila se acercó a la comunidad que viene manifestando inconformidad con respecto al cumplimiento de la ruta de atención integral para víctimas de violencias de género por parte de entidades de la ciudad de Neiva, toda vez que, según algunas mujeres que han padecido en mayor proporción agresiones de tipo físico, psicológico y verbal, las acciones han sido ambiguas.
Ante lo mencionado, la representante y presidenta ante el Consejo Departamental de Mujeres, Ilba Yohana Trujillo Garzón, declaró: “Resulta que hay muchas mujeres que desde la ruta, en especial, lo que tiene que ver son los procesos judiciales, no son tan eficientes y muchas de ellas se cansan de estar buscando por un lado, buscando por el otro, tratando de buscar ayuda para lo que se dice en esa ruta de atención, ya que ellas son maltratadas intrafamiliarmente, donde de acuerdo a la Ley 1257 de 2008 que trata cinco tipos de violencias, pues la mayoría de mujeres siguen sufriendo en la sociedad porque ellas van y ponen sus denuncias, las citan para que hagan la ruta de atención empezando por salud, luego pasa por un proceso judicial y ahí es donde quedan estancadas”.
De igual manera, la señora Trujillo Garzón se refirió a la decisión que terminan tomando las mujeres víctimas de violencias, puesto que sienten que el proceso se “queda estancado”, razón por la cual optan por regresar a sus casas con sus antiguos agresores.
“Ellas desisten de estar demandando porque todo vuelve a la normalidad cuando regresan a sus casas donde tienen a su agresor compartiendo con ellas, donde están sin que les presten cuidado. A la par, el maltrato que más están sufriendo las mujeres es el maltrato psicológico, de acuerdo con la 1257 donde nos habla de los tipos de violencia, este es una de las formas de violencia de género y nuestras mujeres siguen sufriendo. Al igual, con tristeza podemos decir que el Huila es uno de los departamentos que está en el rating de los primeros a nivel nacional donde se ve más violencia hacia nuestras mujeres y donde desafortunadamente también se ha sufrido de muchos feminicidios”, opinó la líder Trujillo Garzón.
En cuanto a las respuestas que la comunidad en mención ha recibido de las instituciones implicadas en dar cumplimiento a dicha ruta, la presidenta ante el Consejo Departamental de Mujeres explicó
que se han manifestado de manera reiterada, han tratado de trabajar con los entes gubernamentales, precisamente para que se de cumplimiento a todos los programas y que las mujeres se beneficien sin lograr, hasta el momento, el cabal acatamiento de lo dispuesto.
“Continuamos insistiendo en que todos los procesos se lleven a cabo beneficiando a nuestras mujeres, para que los programas realmente lleguen a estas mujeres que realmente lo requieren y lo necesitan. Desafortunadamente, todavía seguimos con el estigma de estas mujeres que no hablan, de aquellas mujeres que no cuentan su realidad, la vida que están llevando y esto nos ha impedido un poco para que se le pueda brindar el apoyo que verdaderamente ellas requieren. Por ejemplo en Neiva, se está ejecutando un programa contra la violencia que se llama ´Alza tu voz´ y lo otro es que se está desarrollando la campaña del gobierno nacional que se llama ´¿dónde está Ángela?´, una estrategia que están implementando con los establecimientos públicos, en la cual la mayoría de mujeres cuando están recibiendo un tipo de maltrato físico, es en la vida nocturna, entonces así desde el Huila se está tratando de llegar hasta el último rincón”, agregó la señora Ilba Yohana.
En lo que se refiere a las zonas de mayor incidencia, la líder comunal indicó que gran parte de los casos se dan en zonas vulnerables de Neiva, especialmente en las comunas 6, 8, 9 y 10, motivo que las ha llevado a asociarse para generar escenarios de empoderamiento social y económico.
“En el grupo de mujeres que tenemos, más que darles charlas, capacitaciones y consejos, estamos buscando empoderarlas económicamente y, para esto, buscamos las formas de cómo ellas pueden crearse unas estrategias de emprendimiento y que esa sea una forma para que ellas tengan un ingreso y puedan manejar su propio recurso, así ellas no dependerían de sus parejas ya que ese es uno de los factores en el cual las mujeres sufren de violencia porque dependen económicamente de otra persona y por eso sienten que tienen que vivir sumisas, tienen que estar haciendo lo que esa personas les digan, entonces si empoderamos a esas mujeres y les facilitamos unos canales de rendimiento, pues ellas van a sentir que están en un espacio muy importante, se van a sentir útiles para ellas mismas, para sus familias y para la sociedad”, concluyó Ilba Yohana Trujillo Garzón.
