Comunidad del barrio Emayá denuncia presunto incumplimiento por parte de la organización, pese a las múltiples solicitudes registradas.
DIARIO DEL HUILA, COMUNIDAD
Por: Angélica Andrade
A partir del trabajo de mantenimiento realizado desde octubre de 2022 por los contratistas de Las Ceibas Empresas Públicas de Neiva, E.S.P., quienes se encargaron de reemplazar el sistema de tubería de aguas negras en el tramo que involucra la calle 7 sur entre carreras 17 y 18, la comunidad del barrio Emayá, en cabeza del presidente de la Junta de Acción Comunal, Osmerl Ricardo González Manrique, manifestó a través de Diario del Huila los detalles de la problemática que dicha labor inconclusa está generando entre los pobladores de la zona.
Es de mencionar que, la problemática se da toda vez que el tramo en mención corresponde a una pendiente y, en temporada invernal, se dificulta no solo el tránsito, sino la convivencia intervecinal, según dieron a conocer los líderes comunales.
“Como este tramo está ubicado en una pendiente, cuanto llueve, resulta que ellos cambiaron solamente la tubería y taparon con tierra, pero nos han echaron el pavimento y cuando llueve toda esa tierra se convierte en un barro tipo lodo que va a parar a las casas de la parte de abajo, las cuales tienen los cimientos algo profundos en donde toda esa tierra va hasta esas casas y la gente que está abajo se enfrenta con la de arriba y empieza a haber como una controversia que llevan a discusiones bastante fuertes con los otros vecinos”, explicó González Manrique.
Ante lo mencionado, el presidente de la Junta de Acción Comunal del barrio Emayá aclaró que la situación ha sido remitida a la institución respectiva, solicitando agilidad en la solución que responde a la pavimentación.
“Ya se les reportó a empresas públicas a través del coordinador asignado en la comuna, porque hay un enlace asignado a cada zona de Neiva, ya se les dijo, se les enviaron fotos, hablé con el ingeniero Andrés Felipe, él nos visitó, miró y estamos a la espera de que la señora gerente asigne el presupuesto que se necesita para ese arreglo, pero nos preocupa porque ya ha pasado noviembre, diciembre, enero, febrero, marzo y lo que llevamos de abril, ya más de cinco meses y nos preocupa porque ellos fueron los que rompieron, ellos son los que deben dejar la vía nuevamente como estaba”, aseveró el líder de la Junta de Acción Comunal.
Conflicto
Tal como lo sugirió González Manrique, la situación que se genera en la vía cuando llueve provoca conflictos en los habitantes del barrio, quienes se han agredido por el alto nivel de intolerancia a raíz del lodo que va a parar a las viviendas.
“La gente que vive en la parte de abajo se ha puesto en la tarea de recoger la tierra que resulta de ese daño, las saca en una tula de fibra y las han vuelto a colocar arriba. Los de arriba se incomodan porque los de abajo llevan la tierra hasta allá y de alguna manera eso no les gusta, entonces se genera ese choque entre ellos y la solución radical al problema es que se eche el pavimento”.
En cuanto a las acciones adelantadas para ser escuchados, se identificó que la gestión ha sido a través de los grupos de apoyo vía WhatsApp y que las solicitudes se han registrado verbalmente en cumplimiento de la instrucción relacionada con el abordaje desde el enlace técnico asignado para la comuna.
“Nosotros manejamos un chat donde se encuentra la gerente, el ingeniero Andrés Felipe y el inspector. Ellos están ahí de la mano y se les llama, se les envían mensajes, entonces no hemos recurrido a otras instancias porque se supone que estamos en el siglo 21 y los medios de comunicación dan celeridad y nos evitan tantos trámites. El coordinador que está de enlace lo único que hace es decirnos ´ya reporté´ y hay que esperar que se abra el proceso y den la orden de trabajo para que puedan venir a hacer eso, él ha estado en toda la disposición de hacernos eso, pero como él no maneja el tema de presupuesto. Él le dijo a la gerente que se necesitan 50 bultos de cemento, según lo que me manifestó, pero pues tienen que esperar que los de arriba aprueben para que puedan ejecutar”, reiteró González Manrique.
En coherencia, la comunidad desconoce cuánto representa la solicitud en términos económicos, sin embargo, se ha establecido la cantidad de materiales para poder realizar el trabajo y así lograr la integración de los vecinos, la tranquilidad y la convivencia.
Controversia
Por su parte, la secretaria de la Junta de Acción Comunal del barrio Emayá, Olga Lucía Arcos, declara que ha notado que los habitantes de la zona indicada por el líder comunal Ricardo, han intentado construir una especie de muros de contención artesanales con el mismo material de la grieta y con bultos, bloqueando el paso de subida y bajada de los vehículos.
“Yo creo que con esos muros de contención que los mismos vecinos han hecho, la problemática sigue y se incrementa tanto en los de arriba como en los de abajo y es eso por lo que las casas de la parte de abajo tienen un espacio de casi un metro de profundidad que hace que con las lluvias y el lodo que se avecina, se les venga el barro a estas casas. Esta problemática tiene divididos a los vecinos de esa cuadra porque fraccionan el pedazo de la casa y tapan el paso del agua que debe ir por una canal o por una sola pendiente, entonces cada casa ha tenido que hacer un sifón. Si se erradica ese problema, evitamos que se tapen los sifones y así no se entraría el agua a las casas”, aludió la señora Olga Lucía.
De igual manera, la líder comunal enfatiza en que no quieren que los demás habitantes sigan sufriendo por causa de este tipo de daños y que otra problemática se viene presentando entre las carreras 17 y 18 donde está pendiente el cambio del alcantarillado porque toda esa tubería, al parecer, está deteriorada.
“Nos cambiaron el tramo de la carrera 18, hasta la 19 A y ese daño está haciendo que haya hundimiento y el piso se está averiando, viéndose no solo feo, sino que puede llegar a convertirse en una trampa y generar que alguien se caiga. De Las Ceibas vino el ingeniero Andrés Felipe a traer un documento que yo firmé porque lo iban a ejecutar en esos días y desde ese entonces no han regresado a accionar nada. Ahí está pendiente el cambio del alcantarillado y hay que hacerlo nuevo. La gente se está disgustando porque las calles se están deteriorando y así sucesivamente”, dijo Olga Lucía.
Sumado a lo anterior, la secretaria de la Junta de Acción Comunal señaló que, en su esquina ubicada al frente de la carrera 18 con calle 6, hay un daño en la tubería de agua potable que hace que succione líquido todas las noches.
“Frente a este caso, queremos que envíen a la gente adecuada, personas a las que no les dé pereza abrir un hueco, a revisar, porque la humedad se está volviendo más profunda y nos preocupa que eso también nos deteriore el piso o nos dañe las paredes y nadie responde. A esto le estamos apostando para que nos hagan el favor y vengan a verificar, sobre el asunto ya se ha hablado en distintos medios y nada”.
En lo referente a la cantidad de familias directamente afectadas, los habitantes exteriorizaron que equivalen a los pobladores que habitan en aproximadamente 31 viviendas, quienes esperan una solución pronta dado que los acercamientos, las solicitudes y acciones se han registrado de forma insistente.
“Junto a la señora Olga estamos en la tarea de instaurar un derecho de petición con copia a la personería municipal y a la Superintendencia de Servicios Públicos porque son dos temas bastante antiguos para un trabajo de estos. El de la pavimentación está desde finales del año pasado, pero el otro problema, relacionado con el hundimiento está desde antes de pandemia. Con Empresas Públicas siempre ha sido un poco complicado el tema, ha habido disposición por parte de algunos funcionarios como el inspector Sáchica que nos atiende, pero ellos no son los que tienen la última palabra para resolver. Incluso, hace dos años solicité el cambio de la tubería recolectora de aguas lluvias de la escuela de la carrera 20 No. 8 15, Institución Educativa Agustín Codazzi, sede Emayá, porque este líquido va a dar a una recámara, afectando a cerca de 500 niños entre las dos jornadas”, concluyó González.