Comunidad de la Institución Educativa Eduardo Santos de Neiva, denunció presunta irregularidad en la calidad de los productos ofrecidos a través del PAE.
DIARIO DEL HUILA, NEIVA
Por: Angélica Andrade Quimbaya
A partir de la aparente repetitiva entrega de alimentos en porciones inferiores a las establecidas en las minutas y la reducida calidad, estudiantes y directivos de la Institución Educativa Eduardo Santos, ubicada al norte de Neiva, brindaron detalles sobre los hallazgos y situaciones acontecidas.
Al respecto, el rector de la Institución Educativa Eduardo Santos, Paul Montero Falla, reveló que buscan la aplicación de los correctivos pertinentes a favor de los niños, niñas y adolescente que se atienden, toda vez que se han presentado una serie de aparentes problemáticas respecto a la distribución de los alimentos que se entregan en las tres sedes, Luis Carlos Galán, Alberto Rosero Concha y la sede central Eduardo Santos, a través del Programa de Alimentación Escolar, PAE, estrategia con el que, desde el gobierno nacional, se pretende “contribuir con el acceso y la permanencia escolar de los niños, niñas y adolescentes en edad escolar y registrados en la matrícula oficial, fomentando estilos de vida saludables y mejorando su capacidad de aprendizaje, a través del suministro de un complemento alimentario”.
“En algunas ocasiones han llegado a mi oficina y me han llamado al restaurante para mostrarme que algunos productos, como el caso de las mandarinas, las naranjas, los mangos y los bananos, vienen de muy baja calidad, muy pequeños y ya iniciando un procedo de descomposición. Yo les he indicado a las manipuladoras que por ninguna circunstancia entreguen productos con los que nuestros estudiantes puedan correr algún riesgo al consumirlos. Tenemos esta problemática con el contratista debido a que él le dice a las manipuladoras que reporten los casos para hacer el cambio, pero esos cambios se demoran, alguien de la contraloría nacional nos visitó y nos dejó la observación que para efectuar esos cambios se debe informar previamente con cinco días de anticipación para que la minuta sea ajustada. El profesor Edwin García ha estado muy pendiente de todo el proceso de veeduría junto a la contralora estudiantil y la personera quienes están permanentemente revisando estrictamente que se cumpla lo que está acordado en la minuta”, socializó el rector de la institución educativa.
En cuanto a la respuesta que la institución educativa ha recibido de los entes de control, el directivo Montero Falla expresó que iniciando semana se realizó una reunión amplia a la que asistieron representantes de la secretaría de educación, la nutricionista, la persona encargada de hacer el seguimiento a la calidad de los productos que se entregan en el PAE, de la procuraduría, de la secretaría de la salud y de la empresa contratista, al igual que dos docentes, la personera estudiantil y la contralora estudiantil, toda vez que son aproximadamente 1.230 raciones las que están asignadas a las tres sedes.
A esto se agrega la preocupación que ha generado la implementación del PAE por parte de la empresa contratista, toda vez que la calidad y cantidad no es la que se esperaría: “Los estudiantes le manifestaron por escrito a la secretaría de educación de unos alimentos que se entregaron incompletos, puesto que les faltaba el queso, el lunes que se llevó a cabo el incidente, dentro de los alimentos que les iban a dar para consumir a los estudiantes, venía un plátano que estaba presuntamente en un alto grado de descomposición, así les suministraron el producto a los estudiantes de la jornada de la mañana, algunos de ellos manifestaron y lo tenemos registrado acá y se lo vamos a dar a conocer a las autoridades competentes para que inicien la respectiva investigación, esos plátanos, al parecer, les hizo daño, estaban de mal sabor y olor. Lo más irresponsable es que al veedor, el señor Juan Pablo, emitió un juicio sobre estar con chef y que según el chef ese plátano se podría repartir así y que entre más negrito mejor, nosotros tomamos esos plátanos en presencia de la personera estudiantil, la contralora estudiantil y un representante de los estudiantes que, con la profesora Toledo, abrimos un plátano de esos y pudimos contrastar que efectivamente no era apto para el consumo, que según Juan Pablo, el veedor externo, ese plátano se podía entregar a los estudiantes de la jornada de la tarde”, agregó Edwin García, docente de la Institución Educativa Eduardo Santos e integrante del consejo directivo.
La respuesta del veedor
Con el fin de poner en evidencia el actuar del veedor contratado para hacerle seguimiento al cumplimiento del contrato del PAE, se procede a compartir el audio en el que el profesional Juan Pablo, ingeniero industrial, indica que los plátanos suministrados al restaurante para la entrega del lunes se pueden consumir en ese estado:
“Me dicen que no hay plátano hoy lunes no hay nada nada de fruta acá en la bodega, entonces me dicen que con ese negro se puede hacer, que lo haga con ese negro, que no hay problema, que antes entre más negro, es mejor, me lo está diciendo acá un chef que trabaja acá en la bodega y me dice que no, que ese está bueno y le mostré el plátano abierto, que lo haga, sin miedo”, dijo el veedor a través de un audio que envío vía WhatsApp.
Estudiantes
Con el fin de conocer la posición de los afectados con la entrega de productos de esta calidad, se realizó acercamiento a varios estudiantes quienes coincidieron en que las raciones son pequeñas y las consumen porque es lo que tienen al alcance:
“El plátano estaba refeo, estaba negro y tenía una raya en la mitad cuando me lo sirvieron, el huevo también estaba feo pero lo peor era el plátano. Esta y otras semanas también nos han dado cosas feas, las porciones son pequeñitas, pero si lo dan pues uno no espera mucho”.
“Nos dieron un plátano, huevo y me parece que café con leche, el plátano estaba como muy negrito, no tenía el sabor de plátano, los huevos estaban regulares y no tenían el sabor normal del huevo y pues hoy normal, nos dan la arepa así tamaño pequeño, obviamente uno queda con hambre porque no dan lo que uno se merece”.
“Soy el representante del grado 802 de la Institución Educativa Eduardo Santos y quería decirles que los desayunos de la minuta están llegando de muy mala calidad, por ejemplo, los plátanos llegaron podridos y supuestamente habían dicho que así se podían cocinar, pero olían horrible. Llegó a haber unas veces en las que traían un pan que llegaba con moho y las leches vencidas”.
“Soy la personera de la Institución Educativa Eduardo Santos, con respecto al PAE se han presentado algunas irregularidades como lo fue con los plátanos que se encontraban en un estado de descomposición y, junto a una profesora, se abrió uno y se observaba que el plátano estaba en total descomposición, tenía un olor a fétido y algunos compañeros estudiantes manifestaron que se sentían con dolor estomacal. Ayer se revisó y se vio que no se estaba entregando el refrigerio que presuntamente estaba en la minuta que decía que el refrigerio que tenían que entregar a los estudiantes era pollo con pimentón, jugo de mango y arroz blanco, pero lo que se entregó fue arepa, un pedazo de queso y agua de panela”.
Cumplimiento
Tras las declaraciones y testimonios de estudiantes y directivas de la Institución Educativa Eduardo Santos, Diario del Huila contactó a la secretaria de educación de Neiva, Cecilia Losada de Fierro, quien manifestó que una vez la dependencia conoció la queja correspondiente a la entrega de plátanos descompuestos, que generó un aparente malestar estomacal o indicios de intoxicación, procedieron a atender de inmediato la situación.
“Esta semana hubo presencia en la misma institución educativa, en el lugar de los hechos, en la que se hizo presencia la procuraduría, la secretaría de salud, la contraloría, el operador del PAE, el rector, el equipo de secretaría y los profesores que son del equipo veedor de cada una de las instituciones. En esa reunión se escucharon los hechos presentados por el personero y efectivamente se dijo que el plátano había llegado en descomposición, por lo cual secretaría de educación hizo un recorrido por las entidades prestadoras inmediatas de salud y no encontró ningún niño en condición de intoxicación. Por tal razón, la conclusión de la reunión es que el plátano que sí estaba en descomposición porque hubo acuerdo entre todos los presentes de que sí había llegado pero esos plátanos fueron sacados aparte y depositados en la respectiva bolsa de la basura, no llegaron a los platos de los niños. No estoy hablando desde el despacho de la secretaría, sino desde la conclusión que se llevaron estos entes de control que hicieron presencia en el lugar de los hechos”, expuso la secretaria de educación municipal.
De igual manera, la funcionaria reiteró que la foto y la denuncia que hicieron los estudiantes y de la que Diario del Huila fue notificado, es producto de la extracción del plátano descompuesto que ya estaba en la basura: “Ellos sacaron el plátano descompuesto de la basura y desde allí tomaron la foto, esas son las evidencias, no se lo alcanzaron a comerlo los estudiantes, no se les sirvió y nuestra recomendación clara que, desde esta operación de la secretaría de educación se le ha hecho al operador para que le exija a las madres manipuladoras que revisen los alimentos antes de ser colocados en los platos de las raciones de los niños y, en este caso se demostró que fueron depositados en la basura, que los dañados se repusieron por plátanos buenos pero que nunca fueron colocados en los platos, ni servidos a los niños”, exteriorizó Losada de Fierro.
Cambios en la minuta
Debido al hallazgo confirmado durante visita realizada por Diario de Huila a la institución educativa, se le indagó a la secretaria de educación municipal acerca de los motivos que han llevado a modificar lo que está en la minuta publicada, en la que se especifica que el menú para el jueves 27 de abril era pollo con pimentón, arroz blanco y jugo de mango, dieta que fue reemplazada por una arepa, media porción de queso y agua de panela con leche, obteniendo que esa denuncia no estaba dentro del informe que la dependencia recibió y no estaba incluida en el tema central por el cual se le había contactado.
“Recomendación que se quedó como tal es que los profesores veedores hagan más presencia en el restaurante y que realmente se cumpla para que los alimentos no lleguen en descomposición a ser servidos a los niños. Sobre el cambio de minuta, lo que se ha pensado es que por alguna razón, en algún momento, el comité veedor de cada sede debe saber que hubo un cambio de minuta, debe conocer las razones pero los cambios de minuta jamás deben obedecer a disminuir la ración ni el número de alimentos”, aseveró la secretaria de educación municipal, quien finalizó exponiendo que se cuenta con una interventoría que no trabaja para el operador, sino para que se cumplan todos los procesos contractuales que están establecidos previamente y que, además de eso, tan pronto se radica una queja, la entidad procede a garantizar la presencia de los profesionales encargados, que también velan por que se cumplan los términos del contrato.