Seguramente conoces a los castores por su increíble habilidad para construir represas, pero, ¿te has preguntado en algún momento el por qué lo hacen? Continúa leyendo estas líneas y conoce todo lo relacionado a estos magníficos roedores.
DIARIO DEL HUILA, MEDIO AMBIENTE
Los castores, considerados unos de los roedores de mayor tamaño que existen en el mundo, son originarios de Norteamérica y Eurasia. Son animales semiacuáticos, cuya familia Castoridae, se compone de tres especies denominadas castor americano, europeo y de Kellogg. Este último desafortunadamente se encuentra extinto en la actualidad.
Su distribución geográfica se presenta exclusivamente en el hemisferio norte del planeta. Aunque algunos especímenes de castores americanos han sido introducidos por el hombre en ciertas regiones de Chile y Argentina. Se les conoce principalmente por ser animales trabajadores, los cuales emplean la mayor parte de su tiempo en construir lo que se conoce como diques o represas.
Existe una razón por la cual los castores construyen este tipo de estructuras en especial, la cual seguramente querrás conocer con este artículo. Continúa leyendo y conoce más acerca del animal salvaje que mejor se adapta a las situaciones que se presentan en su entorno.
Características de los castores
Los castores son animales medianos que alcanzan un peso promedio en la adultez de 27 kilogramos y una longitud de 80 centímetros aproximadamente. Están equipados con una cola ovalada cubierta de escamas, patas palmeadas y una gruesa capa de piel. Su pelaje impermeable está compuesto por dos capas, una sedosa y otra superficial mucho más áspera.
De igual manera, cuentan con una poderosa mandíbula y un par de incisivos superiores de 25 milímetros de largo, los cuales son fuertes y duraderos por su alto contenido de hierro. Un dato curioso respecto a este mamífero es que sus dientes nunca dejan de crecer a lo largo de toda su vida.
Por otro lado, al ser animales semiacuáticos poseen orejas y fosas nasales que se pueden cerrar y abrir según lo desee. Tanto el castor americano como el europeo cuentan con características morfológicas muy similares, con la única diferencia de que los últimos poseen cráneos más pequeños y colas más estrechas.
En cuanto a su hábitat, los castores prefieren las zonas con ríos de agua dulce, lagos, estanques o pantanos. Se alimentan exclusivamente de las cortezas, hojas y ramas de los árboles, junto con las raíces de algunas plantas acuáticas.
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Cómo y por qué construyen represas
La principal razón por la cual los castores construyen sus represas es por un aspecto meramente de supervivencia. Gracias a estas barreras, estos roedores logran detener la corriente del agua para crear estanques en donde pueden crear sus madrigueras. De igual forma, al crear estas estructuras, los castores se protegen de ciertos depredadores como coyotes, lobos y osos, además de asegurarse el acceso a la comida durante el invierno, pues estos mamíferos no hibernan.
La construcción del hogar inicia con el corte de los árboles que encuentra en su entorno para obtener piezas de madera. Posteriormente, se apilan los trozos con el objetivo de construir una barrera horizontal para detener el agua. Dada su capacidad de cortar madera de hasta 30 centímetros de grosor en 30 minutos, los castores pueden crear sus diques en una sola noche.
Estos mamíferos son reconocidos por construir represas de gran longitud. De hecho, el récord lo ostenta una estructura encontrada en Montana, Estados Unidos, la cual medía 652 metros de largo y 4 metros de altura. No obstante, por lo general los diques suelen medir 10 metros de largo y 1.5 metros de altura.
Madrigueras
Los castores también se caracterizan por la edificación de sus madrigueras. Estas son construidas a partir de ramas, fango, musgo y hierba entretejida. Son de forma cónica y cuentan con canales para la entrada y la salida. De esta manera, si un depredador ingresa por un canal, el castor puede escapar rápidamente por el otro.
De igual manera, las entradas se encuentran bajo el agua para evitar que estás queden bloqueadas cuando la superficie del agua se congele y para dificultar la entrada de cualquier otro animal. El mantenimiento de sus hogares es diario, pues el castor al identificar cualquier tipo de fuga o entrada de agua a su guarida, se dispone a repararla rápidamente reemplazando la madera y añadiendo más lodo a su estructura.
