Según el Fondo Monetario Internacional, el intento de Colombia de incorporar a los venezolanos indocumentados a su fuerza laboral aumentará la capacidad productiva de la economía.
En Colombia hay 1,7 millones de venezolanos; al menos 113.208 están en Santander, según datos de Migración Colombia. Sólo 79.405 están en viviendo en Bucaramanga y su área metropolitana.
Con el Estatuto Temporal de Protección Temporal anunciado en meses pasados por el Gobierno Nacional, la economía colombiana tendría un impulso adicional.
Un estudio del Fondo Monetario Internacional (FMI) evidenció que el intento de Colombia de incorporar a cientos de miles de migrantes venezolanos indocumentados a su fuerza laboral aumentará la capacidad productiva de la economía.
Para Ronal Rodríguez, investigador del Observatorio de Venezuela de la Universidad del Rosario, en efecto el estatuto para los ciudadanos venezolanos va a generar dinámicas que les permitirá hacer parte de la economía formal en Colombia.
Hasta el momento gran parte de la migración venezolana que reside en Colombia ejerce oficios informales o tiene empleos remunerados inadecuadamente sin el pago de seguridad social. Con el estatuto se podría generarse un estímulo para que más estén formalizados.
“Lo que se ha encontrado en otros fenómenos migratorios es que cuando se les dan esta serie de instrumentos a la población que se encuentra en movilidad humana ellos prefieren pagar impuestos, su propia seguridad social y acogerse a las medidas económicas del estado receptor”, afirma Rodríguez.
Los resultados de la cuarta caracterización de la población migrante proveniente de Venezuela en Bucaramanga, presentados por el Instituto de Estudios Políticos (IEP) de la Universidad Autónoma de Bucaramanga (Unab), revelaron que el 83 % de esa población residente en el departamento mantiene relaciones laborales con colombianos o venezolanos.
Una decisión acertada
El FMI indicó que “los decididos esfuerzos de Colombia por integrar a los inmigrantes venezolanos en la economía, más recientemente otorgándoles el Estatuto Temporal de Protección, debería aumentar el potencial de crecimiento de Colombia a mediano plazo”.
Para Rodríguez, la decisión de Colombia de irse a favor de la regularización es mejor porque evita que este capital humano se vaya hacia la economía informal; además, aporta a la pirámide pensional.
“Si los venezolanos empiezan a pagar sus pensiones, le permite al estado colombiano tener holgura frente al tema pensional que se encuentra en una crisis fuerte porque la pirámide pensional se estaba invirtiendo casi en una columna, ya se venía estrechando su base de forma importante. Con la llegada de venezolanos, que en mayoría son jóvenes, se abre el espacio, pero es fundamental permitirles que puedan estar en la economía formal”, dijo Rodríguez.
Otro aspecto que favorecerá a la economía colombiana es que la población podrá acceder a la banca, pues al estar regularizados podrán generar ahorro, tener inclusión financiera y facilidades de crédito.
Los capitales pueden fortalecer las dinámicas que van desde el sistema pensional o incluso con la posibilidad de conseguir recursos no solo para ellos, sino para los colombianos.