Este 2 de julio se conmemora el Día Mundial del OVNI, con el objetivo de pensar en aquellos avistamientos que no se pueden explicar de manera lógica, pese a la avanzada tecnología que tenemos en la actualidad y que tal vez, algún día la pregunta sobre si estamos solo en el universo se conteste.
Este día se estableció en 2001, después del incidente de Roswell, que tuvo lugar en 1947, cuando un objeto no identificado cayó en el desierto de Nuevo México. Desde ese entonces, diversas naciones se han dedicado a investigar lo ocurrido y a qué se atribuyen los recientes avistamiento.
Y es que la palabra “OVNI” es acrónimo de “Objeto Volador No Identificado” (Unidentified Flying Object, por sus siglas en inglés). Dicho término fue establecido en 1952 por el director de un programa de la Fuerza Aérea de los Estados Unidos, encargado de estudiar y analizar los “platillos voladores”, en 1952.
Hay que señalar que, pese al paso de los años, el tema de los OVNIS está más vigente que nunca, ya que cada vez hay más videos o testigos que dicen haber a avistado objetos que parecen ser de otro mundo. Simplemente, recién la Administración Nacional de Aeronáutica y el Espacio (NASA), anunció que se estableció un grupo de estudio que analizará los Fenómenos Aéreos no Identificado (FANI o UAP).
“El número limitado de observaciones de UAP dificulta sacar conclusiones científicas sobre la naturaleza de tales eventos”, dijo la NASA en un comunicado, bajo el argumento de que estos objetos u OVNIS son de interés tanto para la seguridad nacional como para la seguridad aérea. De esta manera, estos hechos siguen investigándose.
