Por: Leonardo Sanmiguel Benavides
Colombia ha sido un país históricamente proteccionista ya que tan solo inició su apertura real al mundo luego de 1991 en el gobierno de Cesar Gaviria, el cual era un país indefenso para poder competir con el feroz mundo de la globalización, monopolios y oligopolios se encontraban por doquier en los rincones productivos de nuestra nación una torpe manera de complicidad de los gobiernos de turno para hacer ricos a unos pocos y dependientes a muchos otros.
Desde hace un par de semanas se viene hablando de una reforma “Social, Solidaria y sostenible” que pretende recaudar una cifra cercana a los 30 billones de pesos con el objetivo de poder ampliar proyectos sociales que vienen de gobiernos anteriores y algunos otros creados en el mandato actual para hacer frente a la crisis social y económica ocasionada por el Bicho más conocido como (Covid-19) sin embargo es claro que la peor parte se la llevaran los de siempre la clase media y trabajadora del país.
Históricamente los gobiernos de nuestro país en su mayoría han tomado decisiones en pro de los más ricos pues vemos como son las grandes empresas quienes gozan de jugosos beneficios por el simple hecho de ser quienes generan los empleos en todo el territorio nacional o al menos así lo justifican, cuan equivocados estamos porque esta manera de percibir la economía solo extiende aún más la brecha que existe entre ricos y pobres haciendo cada día a los ricos más y ricos y a los pobre más pobres.
El gobierno pretende recaudar gran parte de los recursos por medio del IVA aumentando el porcentaje de recaudo de algunos productos del 5% al 19% sin embargo se pretende gravar a las pensiones “altas” sin tener en cuenta que dichas persona ya pagaron impuestos durante toda su vida y ahora quizás solo quieren disfrutar del fruto de su esfuerzo durante ella, por otro lado, se van gravar de manera permanente con el 3% a los patrimonios igual o superiores a 5 mil millones de pesos un porcentaje muy inferior para aquellos que gozan de grandes comodidades.
Lo que es claro es que el gobierno Duque se está equivocando una vez más pues si bien es necesaria algún tipo de reforma esta se sigue enfocando en golpear a la clase media y no a quienes disponen de mayores recursos, si bien es necesario apoyar a los más necesitados de nuestra nación es indispensable lograr recaudar dichos recursos de otra manera sin atentar una vez más con los de siempre, porque si de verdad se desea equilibrar la balanza entonces se necesita que los grandes bancos y empresas históricamente protegidas se metan las manos en los bolsillos y sean la puerta para construir un país más equitativo y con menos pobreza.