Con una estricta cuarentena desde principios de año y una campaña de la vacunación que avanza a buen ritmo, Londres registró, por segunda vez este año, un día en el que no hubo muertes por el coronavirus.
Esto sucedió el pasado domingo 28 de marzo, según información de la agencia de salud pública del gobierno británico, Public Health England (PHE).
Los datos tienen en cuenta a los pacientes que murieron dentro de los 28 días posteriores a una prueba de coronavirus positiva.
De la misma manera, en todo Reino Unido, el número de muertes registradas el domingo fue de 19.
Después de alcanzar su punto máximo en enero, el número de muertes ha estado disminuyendo desde entonces, al igual que las hospitalizaciones.
Londres ha sido escenario de alrededor del 12% de las muertes por coronavirus en Reino Unido y fue el epicentro de la primera ola de la pandemia en 2020.
En el apogeo de esa ola, en abril del año pasado, se registraron en la capital británica alrededor de 230 muertes relacionadas con el virus por día.
El médico de cuidados intensivos Jim Down dice que, en ese momento, el Hospital University College tenía «dos o tres pacientes muriendo cada dos días».
Los médicos advierten que pese a las alentadoras cifras, hay que seguir en alerta.
A pesar de la mejora en el número de muertes y la reducción de pacientes con covid-19 en la unidad de cuidados intensivos, el doctor señala que hay nuevos desafíos y que es necesario estar preparado en caso de una nueva ola.
«La acumulación de personas que necesitan prótesis de cadera y tratamiento contra el cáncer es enorme. Necesitamos comenzar a traerlas de regreso, y además, mantener los hospitales listos en caso de una tercera ola», analiza Down.