Facundo Molares, quien en su juventud se unió a las filas de las Farc y luego encontró su camino como fotoperiodista, sufrió un fatal desenlace en la capital argentina.
Las calles vibraban con el eco de los reclamos cuando la vida de este excombatiente tomó un giro inesperado.
Conocido en los círculos guerrilleros como «Camilo Fierro» o simplemente «Camilo, el Argentino», Molares se integró en su juventud al Bloque Sur de una guerrilla en la que encontró un propósito y una causa. Su vida tomó un rumbo radical, marcado por años de lucha y compromiso en un conflicto que lo llevó a abrazar una guerra que consideraba propia.
Sin embargo, los años pasaron y Molares dejó atrás la vida de armas para abrazar la lente de una cámara. Con sus fotografías empezó una nueva vida en su país natal buscando narrar a través de una cámara historias ajenas.
Este jueves, en el icónico escenario del Obelisco en Buenos Aires, Molares participaba en una manifestación. Versiones refieren que la policía intervino en la protesta alegando actos violentos por parte de los manifestantes. Según las autoridades, intentaron incendiar una urna, lo que desencadenó una respuesta enérgica por parte de las fuerzas de seguridad.
Le puede interesar: Hallan cocaína en la Casa Blanca buscan al responsable
La situación escaló rápidamente y en medio del caos, Molares sufrió un paro cardíaco. Las maniobras de reanimación no lograron revivirlo, y la noticia de su fallecimiento resonó en toda la nación. El Ministerio de Salud informó más tarde que las causas del deceso estaban relacionadas con un paro cardíaco.
“Durante más de media hora se le hicieron maniobras de reanimación, hasta que se constató el fallecimiento y las causas del deceso se relacionan con un paro cardíaco producto de factores de riesgo”, comunicaron las autoridades.
Las reacciones no se hicieron esperar. La Federación Argentina de Trabajadores de Prensa condenó enérgicamente la represión policial y el trágico fallecimiento de Molares. Demandaron justicia y que se responsabilice a los involucrados tanto a nivel material como político.
