Edna Yolima Calderón
El huilense Germán Alberto Bahamón Jaramillo, es hoy uno de los líderes empresariales más importantes del país, no solamente por ser el Gerente General del gremio más representativo de Colombia, que cuenta con aproximadamente 548.000 familias caficultoras federadas, 4.644 Representantes gremiales municipales, 180 Departamentales y 15 Nacionales, elegidos democráticamente por los caficultores del país en un proceso que hace de la Federación Nacional de Cafeteros, una Institución sólida y legítima.
La llegada del ingeniero Bahamón a la Gerencia de la FNC, es motivo de alegría y orgullo para los huilenses, avizorando una oportunidad gigante de estar en la esfera nacional con un digno hijo del departamento, con formación y experiencia en empresas internacionales, donde venía desempeñando cargos de alto nivel con excelentes resultados.
Bahamón, muy joven por cierto, inteligente, de carácter pero prudente, viene haciendo lo propio en la FNC, respondiendo a las peticiones del sector y a las propuestas que realizó ante los 15 Comités Departamentales. Después de realizar el diagnóstico de la situación de la Federación, tomó medidas, inicialmente suprimiendo gerencias y cargos en la oficina de Bogotá, en Almacafé, relevando altos directivos, eliminando cargos y dándole un giro en torno a la austeridad y la eficiencia de los procesos y recursos.
Siguiendo con esta línea en los últimos días hizo anuncios como por ejemplo, el plan de transformación, donde prima la austeridad, el ser más eficiente la gestión de la Federación y al tiempo transferir mejores servicios a los caficultores, acciones que sin duda generarán espacios para ejecutar las metas trazadas en hacer de la Federación y las empresas que la conforman, entidades rentables, autosuficientes, sostenibles, todo en procura de mejorar las condiciones nuestros caficultores y sus familias, de aportar al desarrollo del país, y en el caso del Huila, seguir siendo actor importante en la dinámica social, económica y productiva.
Nuestro Gerente, con su liderazgo innato, heredado por sus padres y abuelos, nos inspira cada día a trabajar con amor y dedicación por los caficultores del país, pese a situaciones que ha tenido que afrontar en su gerencia, con tranquilidad nos orienta en el desarrollo de cada gestión y actividad, motivándonos en el trabajo en equipo, en fortalecer la gremialidad, en la articulación permanente con el sector público y privado, tal cual lo hace con los diferentes ministerios, en especial con el Ministerio de Agricultura y Desarrollo Rural, con resultados como el Incentivo a la Capitalización Rural (ICR) de hasta el 40%, donde las familias caficultoras pueden acceder a un crédito que les permitirá renovar sus cafetales por siembra, pensando en su futuro y rentabilidad, un proyecto con una inversión de $35.000 millones, además con otras carteras, se vienen adelantando mesas de trabajo en torno a convenios dirigidos a los caficultores para fortalecerlos en los procesos de producción, transformación y comercialización del grano.