Los huilenses estamos sintiendo los efectos del calentamiento global, que se está manifestando por las altas temperaturas que estamos sintiendo durante el día y que, por las noches, se presentan unas sensaciones de calor que nos tienen desesperados. De acuerdo con la enciclopedia Wikipedia, el ciclo conocido como el Niño y su fase opuesta la Niña son la causa de la mayor señal de variabilidad climática en la franja tropical del océano Pacifico, en la escala interanual. Son las componentes oceánicas del ENOS (Oscilación del Sur) que corresponde a la aparición, de tiempo en tiempo, de aguas superficiales relativamente más cálidas o frías, como sucede en el Pacífico tropical central y oriental, frente a las costas del norte de Perú, Ecuador y sur de Colombia. Este fenómeno es un evento climático que se genera cada cierto número de años por el calentamiento del océano Pacífico. Sus efectos son notables en el norte de la región Pacífica, los departamentos de la región Andina y en los departamentos de la región Caribe.
Los desastres naturales y las tragedias que llegan con ellos, tienen una triste elocuencia. Mientras la humanidad se desgasta en debates, a menudo manipulados y estancados, las imágenes de otros países, que están afectando la supervivencia de los seres humanos y daños en la dinámica productiva, mientras los políticos están viendo impotentes la magnitud de un reto para el que no estamos preparados. Son un contraste contundente. Estamos en emergencia climática. No estamos ni cerca de estar listos para evitar sus peores consecuencias. Las diferencias de temperatura, presión atmosférica y lluvias entre las costas sudamericanas no se deben a un cambio en los patrones de dirección de los vientos, sino a la dirección este-oeste de las corrientes marinas en la zona intertropical. Los huilenses estamos asistiendo a las diferentes transformaciones que está presentando el clima, que, durante el día, se presentan temperaturas cercanas a los 40 grados centígrados, están afectando la dinámica productiva en el departamento. Se están generando grandes procesos desestabilizadores en la infraestructura productiva y en el bienestar de los habitantes.
El uso masivo del carbón y de los hidrocarburos como combustibles para generar energía eléctrica y para el uso en la locomoción, están creando grandes desequilibrios en el medio ambiente. Es indispensable que los países empiecen a cambiar estos usos industriales y enfocarlos para la producción de bienes sustentables. Estamos sufriendo los efectos catastróficos de incendios forestales, daños en los cultivos y la disminución de los caudales. El medio ambiente se encuentra en serios problemas para conservar su equilibrio, producto de los drásticos daños sufridos, que han sido causados por la industrialización y el crecimiento demográfico inadecuado, lo cual ha generado un temor generalizado entre nosotros, porque se encuentra en vilo el bienestar actual y el de las próximas generaciones.