El pasado 1 de diciembre, el Instituto Nacional de Salud, INS, dio inicio a la vigilancia intensificada de pólvora en el país, por lo que la entidad y el Ministerio de Salud, expidieron la circular que establece las directrices para la vigilancia intensificada, prevención y atención de las lesiones ocasionadas por pólvora pirotécnica e intoxicaciones por fósforo blanco, durante las fiestas de Navidad y fin de año.
En tres casos de los notificados en la ciudad de Neiva, los afectados se encontraban manipulando artefactos explosivos, bajo efectos del alcohol.
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Van diez ‘quemados’
En cuanto a este tipo de hechos, Cesar Alberto Polania, secretario de Salud del Huila, señaló que: “la vigilancia intensificada para lesiones por quemaduras por pólvora e intoxicaciones con fósforo blanco, tiene registradas diez personas quemadas por manipular esta clase de artefactos, estos datos se encuentran en el boletín epidemiológico número 28 del 27 de diciembre de 2023”.
En este sentido, el último caso registrado, se presentó en el municipio de La Argentina, donde una persona de 30 años de edad, sufrió lesiones en las manos, cuando manipulaba un ‘volador’.
Y hasta el momento no se han notificado casos de intoxicaciones por consumo de fósforo blanco o metanol en la región.
Las víctimas
En boletín de vigilancia epidemiológica número 26, indica que se habían notificado nueve casos de lesiones por pólvora pirotécnica, representados en cuatro menores y cinco adultos, donde uno de los menores afectados se encontraba en compañía de un adulto bajo efectos del consumo de alcohol, así mismo, tres personas manipularon pólvora en estado de alicoramiento.
En características de estos eventos, se evidencia que en el 78% de los casos se han presentado quemaduras, 44% laceraciones, 22% daño ocular, 22% contusión, 11% fractura y 11% amputación.
Y el 89% de los casos se han presentado por manipulación, y 11% mientras observaba. Además, en el 44% de los eventos el elemento pirotécnico causante de la lesión, es el tote.
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Pólvora y licor, peligrosa combinación
“Comparado con el año anterior, tenemos una disminución del 30% de los casos. Es importante hacer un llamado de la ciudadanía huilense a reducir los riesgos de quemaduras con pólvora, así como evitar que menores de edad la usen y por supuesto también no correr el riesgo de manipularla en estado de alicoramiento”, añadió el funcionario.
Las autoridades gubernamentales, esperan que el comportamiento en este último fin de semana del año 2023 y el inicio del 2024, sea muy favorable en la disminución de los casos comparados con el año anterior.
Dentro de los últimos casos presentados, se encuentra el de una persona de sexo masculino, de 31 años de edad de Neiva, quien al manipular inadecuadamente elemento pirotécnico tipo ‘tote’, presenta quemadura de segundo grado en mano, con una extensión corporal igual o menor al 5%, además de fractura de huesos de la mano y amputación traumática de falange distal del segundo dedo de la mano derecha, la persona afectada se encontraba bajo efectos del alcohol.
Similar situación vivió una persona de 18 años de edad, de esta localidad, quien al manejar inadecuadamente elemento pirotécnico tipo tote presenta laceración y quemadura de segundo grado en mano, con una extensión corporal entre el 6 y 14%, la persona afectada se encontraba bajo efectos del alcohol.
En otro de los casos, la víctima fue un hombre de 29 años de edad, quien al usar inadecuadamente elemento pirotécnico no identificado presenta laceración, contusión y quemadura de segundo grado en la mano izquierda, con una extensión corporal menor o igual al 5%, la persona afectada se encontraba bajo efectos del consumo de alcohol.
Vigilancia intensificada
Hay que recordar que el pasado 1 de diciembre, el Instituto Nacional de Salud, (INS), dio inicio a la vigilancia intensificada de pólvora en el país, por lo que la entidad y el Ministerio de Salud, expidieron la circular que establece las directrices para la vigilancia intensificada, prevención y atención de las lesiones ocasionadas por pólvora pirotécnica e intoxicaciones por fósforo blanco, durante las fiestas de Navidad y fin de año.
Son más de 11 mil notificadores que generan los datos al sistema de vigilancia, y el INS, es la entidad que reporta las cifras oficiales al país. Gracias a esa vigilancia permanente, el país puede visibilizar los efectos nocivos del uso inadecuado de la pólvora, en qué regiones es más prevalente y activar la ruta de atención para la protección de los menores de edad afectados.
En el último periodo de vigilancia intensificada, que comprendió diciembre de 2021 a enero de 2022, con corte a primero de enero, se presentó un repunte de las cifras en el consolidado nacional y el país alcanzó los 1.052 lesionados. Una cifra que superó ampliamente las cifras atípicas del período 2020-2021, en medio de las restricciones de la pandemia; y supera las reportadas en los últimos seis años, en donde el país en el periodo 2015-2016 reportó para el primero de enero, 845 casos.
Así mismo, aumentó el número de menores de edad afectados. De esos 1052 reportes, 315 fueron menores de 18 años y esta cifra también alcanzó un aumento con respecto al anterior periodo de vigilancia 2020-2021, donde era del 32,91 %.
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Los afectados en el país
La entidad de supervisión, reportó que en Colombia, durante este mes de diciembre, se tienen 434 casos de personas quemadas con pólvora, registrando un aumento del 13% en relación con el año anterior, cuando se reportó 381 afectados.
La evaluación del sistema de vigilancia muestra que del total de lesionados, 147 son menores de 18 años de edad, y 287 adultos. Hasta el momento se registran dos personas fallecidas.
Y tienen identificados a 10 menores de edad, quienes resultaron quemados por estos artefactos, al estar en compañía de un adulto que estaba bajo los efectos del alcohol, mientras que 88 de las personas, estando ebrios sufrieron heridas con pólvora.
Frente a la distribución geográfica de los casos reportados en el último periodo de vigilancia intensificada, la lista de lesionados por departamentos la encabezaron Nariño (153 casos), Antioquia (103), Bogotá (98), Norte de Santander (72), Santander (65), Tolima (60), Cauca y Cundinamarca (56 casos cada uno), que representaron el 57% de los casos, es decir 663. No obstante, estos departamentos representan históricamente gran parte de los casos de lesionados por pólvora en Colombia, puesto que el uso de este elemento hace parte de la tradición.
Entre los artefactos más utilizados están: ‘totes’ (29%), voladores (18,9%), cohetes (10,8%), luces de bengala (3,1%) y volcanes (6,6%), entre otros.
Y en cuanto a las lesiones se distribuyeron de la siguiente manera: un 92% sufrió quemaduras, un 64,3% presentó laceraciones; un 27,4% tuvo contusiones; un 9,4% experimentó amputaciones; un 2,6% padeció daño auditivo y un 6,2% sufrió daño ocular.
