El 2023 concluye con la permanencia de 13 mil venezolanos en el Huila, quienes han buscado nuevas oportunidades fuera de su país de origen, según informa la Asociación de Venezolanos de la cordillera central. Esta cifra, que refleja la realidad migratoria en la región, también abarca a dos mil venezolanos que se encuentran en condición irregular.
Diario del Huila, Panorama
La población migrante venezolana en el departamento del Huila ha experimentado un notable aumento, alcanzando la cifra de más de 13 mil personas, según informó Alexis Cedeño, representante de la asociación de venezolanos en la cordillera central. Esta cifra incluye a aproximadamente dos mil migrantes que se encuentran en condición irregular al no haberse acogido a ninguna medida de regularización migratoria previa.
La situación se agrava debido a que la medida de regulación temporal otorgada durante el gobierno del presidente Duque ha llegado a su fin. Este permiso, que consistió en una autorización temporal para permanecer en el país, no fue aprovechado por un grupo significativo de migrantes venezolanos, quienes ahora se encuentran sin protección y en situación de vulnerabilidad.
La asociación de venezolanos en la cordillera central, encabezada por Alexis Cedeño, ha desempeñado un papel crucial en brindar apoyo a la comunidad migrante. Han canalizado esfuerzos para orientar y facilitar el proceso de refugio, una opción de regularización ofrecida por la Cancillería Colombiana. A través de este proceso, se han logrado resultados positivos, otorgando salvoconductos renovables por seis meses, durante los cuales se espera que se reconozca su protección internacional.
Cedeño expresó su preocupación por la falta de medidas de regularización efectivas para aquellos migrantes que no se acogieron a la anterior regulación temporal. «Esperamos que el gobierno del presidente Gustavo Petro pueda establecer dentro de sus políticas migratorias otra medida de regularización para estas personas que quedaron desprotegidas en el país», declaró.
De acuerdo con las estadísticas proporcionadas por Migración Colombia, el año 2023 concluye con una cifra de 13 mil migrantes venezolanos en el departamento del Huila. La creciente presencia de esta comunidad plantea retos significativos y destaca la urgente necesidad de abordar la situación mediante políticas migratorias efectivas que brinden soluciones adecuadas a quienes buscan refugio y estabilidad en territorio colombiano.
Según la Asociación de Venezolanos en la Cordillera Central los municipios receptores continúan siendo Neiva, Pitalito, Garzón y La Plata.
Así lo indicó Alexis Cedeño, presidente de la Asociación de Venezolanos en la Cordillera Central que atiende a esta población en el departamento, el mayor porcentaje de estos se ocupan en labores de recolección de café y trabajos de ventas ambulantes, trabajos no formales.
Aun cuando la frontera colombo venezolana dio su apertura el año anterior, esto no ha sido factor para que los venezolanos retornen a su país.
Venezolanos en Colombia
Desde el inicio del nuevo milenio, una migración constante de venezolanos hacia Colombia ha ido en aumento, extendiéndose a diferentes países con el paso del tiempo. Según un estudio del Observatorio Migratorio de Venezuela de la Universidad del Rosario, la diáspora venezolana a nivel mundial asciende a 7’320.225 personas, y de ellas, el 39,54 % ha encontrado su nuevo hogar en Colombia. Hasta octubre de 2022, se registraron 2’894.593 migrantes venezolanos en territorio colombiano.
La situación de esta población en Colombia se revela a través de cifras impactantes. Según el mismo estudio, el 59,85 % de los migrantes venezolanos contaban con Permisos por Protección Temporal (PPT) a octubre de 2022, otorgando protección a 1’786.394 individuos. Además, 2’156.105 han finalizado el registro biométrico, 2’387.789 han realizado la encuesta de caracterización, y 2’478.907 han completado el preregistro del Registro Único de Migrantes Venezolanos (RUMV), incluyendo a 780.631 niños, niñas y adolescentes menores de 18 años.
En términos de acceso a servicios, 1’201.818 migrantes venezolanos están afiliados al Sistema General de Seguridad Social en Salud, y 496.027 estudiantes venezolanos se encuentran registrados en el Sistema de Matrícula Estudiantil de Educación Básica y Media (SIMAT).
A pesar de las adversidades, en 2020 se observó una disminución del 2,35 % en la migración venezolana en todo el país. Este fenómeno se atribuye a los flujos de retorno a Venezuela debido a la ralentización de las actividades económicas causada por el confinamiento por el COVID-19 y el cierre de la frontera con Venezuela decretado por Colombia en marzo de 2020.
La emergencia generada por la pandemia hizo imperativo promover el aseguramiento a la salud de la población migrante, facilitando así su vacunación para fortalecer la inmunidad colectiva en beneficio de todos los habitantes del territorio nacional.
Ciudades como Cali encabezan las estadísticas al cerrar el año con el 56 % de migrantes afiliados al sistema de salud, seguida por Barranquilla (38,2 %), Medellín (37,3 %), Bogotá (32,2 %), y Cúcuta (27,1 %), siendo esta última la que menos asegurados tiene proporcionalmente a la población de venezolanos que alberga.
La Encuesta Pulso de la Migración del Departamento Administrativo Nacional de Estadística (DANE) arrojó luz sobre los desafíos que enfrenta esta población en Colombia. La dificultad para encontrar empleo se sitúa en el 47,6 %, afectando por igual tanto a hombres como a mujeres. Las personas jóvenes, económicamente activas (entre 25 y 54 años), experimentan los mayores obstáculos para conseguir trabajo, destacando problemas como la solicitud de documentos que muchos migrantes no poseen, la xenofobia y ofertas laborales con remuneración baja o condiciones desfavorables. Las mujeres, en particular, sufren las consecuencias de condiciones laborales precarias.
A pesar de estos desafíos diarios, el 81,7 % de los migrantes encuestados expresó su intención de permanecer en Colombia durante el próximo año. La percepción positiva sobre las condiciones laborales, los ingresos, la calidad de vida, la educación y el clima son las razones que motivan a la mayoría de ellos a quedarse. Solo el 2,6 % preferiría regresar a Venezuela, y el 1,1 % consideraría trasladarse a otro país. El 14 % de los encuestados aún no ha tomado una decisión definitiva.
Es importante destacar que, entre los migrantes laboralmente activos, la mayoría (32,6 %) son trabajadores independientes, y el 81,5 % cuentan con un contrato verbal más no formal. Además, solo el 26,3 % tiene una cuenta en una entidad financiera, lo que destaca la necesidad de ampliar la aceptación del Permiso por Protección Temporal en más entidades financieras.
En términos de alimentación, un estudio del Programa Mundial de Alimentos revela que entre el 52 y el 73 % de los migrantes en Colombia enfrentan inseguridad alimentaria, resultado de la pandemia, la pérdida de empleos, dificultades en el acceso a la tierra, el aumento de precios de los alimentos y otros factores.
Otro aspecto preocupante, identificado por el Programa Mundial de Alimentos y la Organización Internacional del Trabajo, es la baja afiliación al sistema de pensiones en Colombia, que se sitúa en el 9,4 %, principalmente entre los hombres. Aunque los extranjeros no están obligados a realizar aportes a pensiones, esta obligación debería cumplirse para acceder a beneficios como la pensión de vejez, pensión de sobrevivientes y otros.
¿Qué hará el Gobierno?
En respuesta a esta compleja situación, el Gobierno Nacional ha tomado medidas a través de la Ley 2281 de enero de 2023. Se creó el Sector Administrativo de Igualdad y Equidad y el Ministerio de Igualdad y Equidad, enfocados en prestar una mayor atención a la población migrante. La Dirección para la Población Migrante, dentro de esta nueva estructura, tiene como función principal adoptar políticas y programas para promover los derechos de la población migrante, incluyendo enfoques de género, interseccionales y territoriales.