En un anuncio, el ministro de Hacienda, Ricardo Bonilla, informó que la inflación en el país cerró el año 2023 con una cifra del 10%.
El funcionario destacó este dato como una señal positiva para el poder adquisitivo de los ciudadanos.
«¡La inflación continúa bajando! Esto se traduce en una mejora en el poder adquisitivo de las y los colombianos. El incremento en el salario mínimo y la baja en el Índice de Precios al Consumidor (IPC) son muestra del compromiso de este Gobierno por mejorar las condiciones económicas de las y los trabajadores», expresó entusiastamente Bonilla.
El ministro prosiguió con su análisis al destacar que, bajo estas condiciones favorables, se espera que los colombianos experimenten un aumento de 13 puntos en el poder adquisitivo real del peso entre 2023 y 2024. Subrayó que esta estrategia no se limita a ajustar los salarios simplemente para compensar el efecto de la inflación, sino que busca un verdadero control sobre la misma para recuperar el poder de compra.
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En sus proyecciones, Bonilla anticipó que se espera una disminución adicional en la inflación, situándola en un 5% para el año 2024. Este descenso, según el ministro, se traducirá en un aumento adicional de cinco puntos porcentuales en el poder de compra, sumado a los 1,9 puntos que el salario mínimo ha superado la inflación del 2023.
«No se trata de ajustar el salario para que la inflación después se lo coma. En este caso, se trata de ajustar el salario y que la inflación permita realmente controlarse y recuperar poder de compra», concluyó Bonilla, destacando la importancia de una estrategia económica que no solo reactive los ingresos, sino que también garantice su sostenibilidad ante fluctuaciones inflacionarias.
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