Es preocupante la alerta epidemiológica promulgada por la Secretaría de Salud Municipal por el incremento del número de pacientes enfermos de dengue en el Departamento del Huila. De acuerdo con el boletín promulgado por esta dependencia, en la semana 48 de 2023, se presentaron 3.552 casos, de los cuales 2.190 corresponden a dengue sin signos de alarma, 1.220 con signos de alarma y 142 con dengue grave. Los municipios de Aipe, Gigante, Guadalupe, La Plata, Palermo, Pitalito, Tesalia, Garzón; Hobo, Nátaga, Neiva y Rivera, se encuentran en zona de brote. Esta situación es muy preocupante para la ciudadanía, porque en la mayoría de los casos no atienden las recomendaciones de las autoridades de salud, para evitar la propagación de este mosquito, que es el causante de generar este caos en la salud de las familias. Afortunadamente no se han presentado fallecimientos por esta causa, producto de la atención oportuna que han recibido las personas afectadas por este virus que puede ser mortal.
En solo dos meses de la presente vigencia, se han presentado el mismo número de casos que los ocurridos en todo el año anterior. Esta afirmación es muy preocupante para la ciudadanía, que en la mayoría de los casos no atienden las recomendaciones de las autoridades de salud, para evitar la propagación de este mosquito, que es el causante de generar este caos en la salud de las familias. Afortunadamente no se han presentado fallecimientos por esta causa, producto de la atención oportuna que han recibido las personas afectadas por este virus que puede ser mortal.
Las enfermedades transmisibles como el dengue tienden a quedarse en la población y terminan integrándose a los factores que hay que cuidar para que no se desborden. Son los llamados males endémicos, que permiten conocer su dinámica y, por supuesto, la forma de atajarlos, al punto de que su seguimiento es un deber primario de las políticas de salud pública del país. Hace presencia en más de 730 municipios de los 32 departamentos y presenta picos epidémicos cada dos o tres años, cuyo último ciclo fue en 2019 y 2020, por lo que resulta imperativo reforzar las medidas para atenuar el incremento de casos que se avizoran durante el presente año. En otras palabras, la enfermedad anuncia su llegada, así que no hay excusas para la inacción y fingir sorpresas cuando los enfermos, con sus diferentes niveles de gravedad, llegan a los hospitales. Es importante que asumamos la responsabilidad en el cuidado de la salud del entorno familiar, tendiente a emprender nuevas acciones de prevención para evitar que se aumenten los casos de esta endemia. Recordemos que el dengue es una enfermedad evitable, si evitamos los criaderos del insecto en nuestras viviendas. Así se reduce el riesgo y es tratable si se cuenta con un diagnóstico oportuno.