Una madre Águila Real de Montaña junto a su polluelo fueron registrados a una altitud de 2.100 metros sobre el nivel del mar.
Foto: Eliseo Ortigoza Cangrejo.
Este emocionante suceso tuvo lugar en el Parque Natural Regional Páramo de las Oseras, situado en el municipio de Colombia, al norte del departamento.
El avistamiento no solo es un testimonio de una reproducción exitosa, sino que también subraya la adaptabilidad de estas majestuosas aves a diversos entornos. Este hecho resalta la salud del ecosistema local y enfatiza la importancia de los esfuerzos de conservación destinados a preservar no solo a las águilas reales, sino también la rica biodiversidad y el equilibrio ambiental en la región.
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Cabe mencionar que esta ave está clasifica como «en peligro» a nivel mundial, especialmente en Los Andes, donde solo quedan alrededor de mil individuos desde el norte de Colombia hasta Argentina. Las Águilas Reales de Montaña prefieren hábitats boscosos en altitudes elevadas, como bosques nublados y montanos.
Con un tamaño medio que ronda los 58-66 cm de longitud, estas aves presentan un plumaje oscuro en la cabeza y partes superiores, con un distintivo collar blanco en el cuello y partes inferiores. Su dieta se compone principalmente de aves y mamíferos pequeños, utilizando su aguda visión para localizar presas desde altas perchas.
Se estima que solo quedan alrededor de 100 parejas de estas emblemáticas aves en colombia, habitando principalmente en departamentos como Huila, Antioquia y Nariño. Este avistamiento reafirma la necesidad continua de esfuerzos concertados para proteger y conservar estas especies en peligro de extinción, asegurando así su presencia para las generaciones futuras.
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