Los caficultores del Huila y Colombia, agobiados por las dificultades económicas y climáticas, han enviado un contundente mensaje al presidente Petro. Enfrentando pérdidas significativas y falta de respaldo, advierten que, de no obtener una respuesta satisfactoria, se movilizarán en un Paro Nacional Cafetero, una medida que podría tener repercusiones en la economía local y nacional.
Diario del Huila, Primer Plano
Los caficultores de base, quienes rara vez, e incluso en ocasiones nunca, han tenido contacto directo con sus representantes en el Comité de Cafeteros del Huila y la Federación Nacional de Cafeteros, observan cómo unos pocos se benefician mientras ellos luchan incansablemente por preservar la cosecha cafetera. Este desafío se agrava debido a los elevados costos de los insumos, la baja remuneración por la carga y las adversidades climáticas actuales.
Estos caficultores, que trabajan arduamente para superar las dificultades mencionadas, han expresado su agotamiento al no ser escuchados en las instancias de poder nacional. Sienten frustración al recibir delegados que no aportan soluciones concretas a sus problemas. Motivados por esta situación, han enviado una carta al presidente Gustavo Petro, buscando establecer una comunicación directa con él y solicitar su intervención en la crisis que enfrenta el sector cafetero.
En caso de no obtener una respuesta oportuna, advierten que, en la segunda semana de marzo, los caficultores no solo del Huila sino de otras regiones del país se movilizarán hacia la ciudad de Bogotá. Como último recurso, consideran la posibilidad de llevar a cabo un Paro Nacional Cafetero, medida que perciben como la alternativa más consolidada y efectiva para llamar la atención sobre la crítica situación que enfrenta la industria cafetalera en Colombia.
La pérdida del 50% de la cosecha principal del primer semestre, la aparición masiva de la broca y la falta de llenado del fruto debido a las condiciones climáticas adversas han dejado a los cafeteros vendiendo pasilla y café de baja calidad.
Cosechas en peligro
Blanca Beyba Cedeño, una caficultora del corregimiento de Vegalarga, comparte su angustia: «Es crucial que se nos escuche. El fenómeno del Niño nos está golpeando fuertemente; en lugar de avanzar, nuestros cultivos están en declive. Los que optamos por la renovación de cafetales estamos enfrentando pérdidas significativas. No contamos con respaldo alguno de entidades como el Banco Agrario ni veo apoyo por parte de la Federación Nacional de Cafeteros. Lo que ofrecen como ayuda se dirige mayormente a los grandes productores, mientras que nosotros, los pequeños caficultores, nos sentimos olvidados. En estos momentos, la única ayuda que me está salvando de la crisis es un cultivo de banano que poseo; de lo contrario, estaría enfrentando una situación desesperada. Mi cafetal no ha producido nada, y he sufrido pérdidas de alrededor de 2 mil palos. Lo poco que queda ahora está en peligro, pero espero poder recuperar algo«.
Por su parte, Eiseover Cruz, un caficultor de la vereda Puertas del Sol de Tello, añade: «Continuamos siendo golpeados por los altos costos de los insumos. Necesitamos un precio estable y sostenible, ya que lamentablemente, lo que ganamos no alcanza para cubrir todos los gastos de producción. Actualmente, estamos vendiendo la carga a un millón cuatrocientos mil pesos. Estamos apenas sobreviviendo, y las altas temperaturas están afectando la calidad del grano, poniendo en riesgo alrededor de cinco mil palos de café que tengo«.
Ante esta realidad desalentadora, los cafeteros del Huila han decidido tomar medidas drásticas. En una reunión celebrada el 9 de febrero, representantes de todos los municipios acordaron solicitar el apoyo del gobierno nacional y la Federación Nacional de Cafeteros para evitar una crisis social de proporciones alarmantes. Pues en varias oportunidades se le ha dado ha dado a conocer esta situación a la Ministra de Agricultura, la delegada presidencial para las regiones, presidente de Banco Agrario, sin tener solución alguna.
En una carta dirigida al presidente Petro, los caficultores expresaron su agotamiento frente a reuniones que no generan soluciones y solicitaron una reunión urgente para discutir sus demandas directamente con él. Enfatizaron el compromiso del presidente con la salvaguarda del campo y su reconocido apoyo a los cafeteros de base.
La carta incluye peticiones democráticamente elaboradas que reflejan las preocupaciones y necesidades de los caficultores del Huila. Los cultivadores esperan una respuesta pronta y la confirmación de una reunión que aborde de manera efectiva la crisis que enfrenta el sector.
La situación en el Huila es especialmente crítica, ya que 35 de los 37 municipios dependen económicamente del café. Con cerca de 84,000 familias y 146,000 hectáreas dedicadas al cultivo, la región representa aproximadamente el 20% de la producción nacional de café. Con 14 años consecutivos como primer productor en Colombia, el Huila enfrenta una amenaza que podría tener consecuencias devastadoras para la economía local y nacional si no se toman medidas urgentes.
Un año de solo reuniones
Armando Acuña, líder cafetero y Diputado del Huila, expresó su preocupación ante la situación actual tras un año de encuentros en los cuales, en lugar de ser atendidos por los ministros, han predominado las intervenciones de los asesores. Enfatiza la necesidad de cambiar esta dinámica y buscan una audiencia con el presidente Gustavo Petro. Este llamado, que se presenta como un ultimátum, plantea la posibilidad de realizar un plantón en Bogotá en caso de no recibir una respuesta satisfactoria. La frustración se fundamenta en la falta de resultados tangibles para los caficultores en la región, a pesar de los anuncios y acuerdos proclamados durante el último año a nivel central.
El líder cafetero enfatizó que la última acción del Ministerio constituyó un engaño para el departamento del Huila en relación con la situación del Fenómeno del Niño. «La respuesta del Ministerio fue distribuir un tanque plástico, unos metros de manguera y una motobomba, sabiendo que los campesinos carecen de acceso al agua. Esta ayuda resulta insuficiente y no cumple su propósito. Con tales acciones, el Huila no ha recibido el respaldo necesario«.
«No hemos percibido las buenas intenciones del Gobierno Nacional. A pesar de centrarse en una Reforma Agraria, esta se está llevando a cabo de acuerdo con sus propios términos, dejando abandonados a aquellos que están dedicados a la producción y cultivo. La manera en que se está implementando augura un fracaso«, agregó.
Acuña subrayó la expectativa de una respuesta por parte del mandatario y la necesidad de que atienda personalmente a los cafeteros. De no ser así, consideran que ha llegado el momento de manifestarse. «No más reuniones con asesores», enfatizó.
Además, hizo hincapié en la injusticia que sufre el Huila a pesar de ser el principal productor de café en Colombia y el mayor contribuyente al Fondo Nacional del Café. «Somos los mayores contribuyentes, pero recibimos el menor respaldo en comparación con el antiguo Eje Cafetero. Esto no es justo. Departamentos con menor extensión cultivada reciben más asistencia técnica. La situación es inaceptable«.
En relación con la producción cafetera en zonas marginales, Acuña señaló que muchos agricultores han perdido sus cultivos, incapaces de diversificar debido a la falta de apoyo estatal y dificultades en la obtención de créditos del Banco Agrario. «Aunque la Federación tiene programas de renovación, los beneficios no llegan a los caficultores. Desconocemos a quién van destinados esos recursos. Los cafeteros se sienten desamparados».
Peticiones
El sector cafetero colombiano ha presentado una serie de demandas que abarcan diversos aspectos de la política agrícola y económica del país. Estas peticiones buscan mejorar las condiciones de los productores, garantizar precios justos, acceso equitativo al crédito y transparencia en la gestión de los recursos del sector. A continuación, se detallan las principales solicitudes:
Política de crédito
-Establecer un departamento de crédito de fomento exclusivo para el campo, con préstamos oportunos, suficientes, a plazos largos y tasa de interés del 0%, acompañados de asistencia técnica gratuita.
– Reglamentar el artículo 66 de la Constitución para tener una política de Estado en crédito agropecuario, considerando las condiciones específicas del sector y construyendo esta regulación con la participación de las bases campesinas.
– Eliminar condiciones restrictivas para acceder al crédito, como reportes negativos por servicios no relacionados con el ámbito financiero.
– Suprimir la política de cartera sustitutiva, que permite a la banca privada evadir su responsabilidad en el crédito agropecuario.
Política de precios
– Garantizar precios de sustentación por encima de los costos de producción para asegurar la rentabilidad de los agricultores.
– Modificar la Ley de Estabilización de Precios para que el Gobierno nutra el Fondo de Estabilización con recursos del presupuesto nacional en proporción a los aportes de los productores.
– Aumentar la base de cotización del factor de rendimiento para la fijación del precio del café.
– Regular los precios de los cafés de segunda calidad para asegurar remuneraciones justas.
Ventas a futuro
– Gestionar plazos más amplios para la entrega de café a compradores internacionales.
– Reglamentar las ventas a futuro para evitar riesgos para los productores.
Asistencia técnica
– Garantizar asistencia técnica gratuita a través de la Agencia de Desarrollo Rural, proporcionada mediante cooperativas y grupos asociativos.
Consejo Nacional del Café
– Crear el Consejo Nacional del Café con una representación diversa de organizaciones del sector, conforme a la Ley 811 de 2023.
Alivio de deudas
– Inyectar fondos al FONSA para aliviar las deudas de los productores agropecuarios, condonando por completo las de los pequeños y un porcentaje significativo de las de los medianos productores.
Subsidio a la compra de insumos
– Subsidiar el 30% de los insumos del sector agropecuario.
Transparencia en la gestión de recursos
– Constituir una mesa por la Verdad Cafetera para examinar el destino de los activos de la FNC y la gestión de los recursos del Fondo Nacional del Café.
Pacto Latinoamericano del Café
– Convocar a los países productores de café de América Latina para establecer condiciones favorables en el precio del café en el mercado mundial.
