Expertos explican por qué pronunciamientos de Petro estarían errados. Pacientes piden soluciones.
DIARIO DEL HUILA, SALUD
Según denuncian asociaciones de pacientes con esta enfermedad, cada día sin insulina se convierte en un tema de vida o muerte. Ya se han presentado casos de hospitalizaciones debido a las complicaciones que genera no contar con el medicamento a tiempo.
Pese a que diferentes organizaciones que trabajan por el derecho a la atención en salud de pacientes diabéticos habían denunciado desde hace cerca de un año que se avecinaba una escasez de insulina, producto vital en el tratamiento de esta enfermedad, este viernes se conoció que se registra en el país la falta en el mercado de varios tipos de insulina.
Hernán Yupanqui, endocrinólogo, reveló que hay “casos alarmantes”, pues existe una creciente dificultad para acceder a insulinas de acción rápida y prolongada, así como a los inyectables GLP1, indispensables para el tratamiento de miles de pacientes con diabetes, una enfermedad que en el país tiene una alta prevalencia, con un 10 por ciento de la población ya diagnosticada (especialmente la de tipo 2) y la mitad sin detectar.
En efecto, el panorama más grave se presenta con la insulina Glargina, solución inyectable 100 UI Y 300 UI, pues está propenso a desabastecerse toda vez que no existen suficientes oferentes y sí un aumento de la demanda.
De acuerdo con el Instituto Nacional de Vigilancia de Medicamentos y Alimentos (Invima), efectivamente, se trata de un problema de escasez de dosis de insulina en algunos lotes por parte del laboratorio Sanofi. En ese sentido, como parte de un reporte del Invima del año 2023, algunos tipos de este medicamento ya se encontraban en riesgo de desabastecimiento.
Dicho laboratorio, a través de un comunicado, explicó que los días 4 y 14 de enero pasados le comunicó al Invima de “la ocurrencia de una demora e intermitencia en la cadena de envíos de la insulina Lantus, producida en Fráncfort (Alemania)”, lo que ocasionó un retraso el suministro de este producto.
Para paliar esta grave situación, la tarde este viernes 23 de febrero se cumplió en el Invima una reunión de emergencia con Sanofi con miras a restablecer cuanto antes el suministro de insulina en Colombia.
El Invima informó que se inició el seguimiento a la disponibilidad “con los titulares de los registros sanitarios en estado vigente” y priorizaron los trámites que están en curso para su estudio y se gestionen cuanto antes. Además, ya se contactaron con los titulares del registro sanitario vigente para continuar con la monitorización de la disponibilidad de la insulina.
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En el caso de la Insulina Lispro, solución Inyectable 100UI/mL, la entidad explicó que está en monitorización. Lo propio ocurre con la insulina Degludec, solución inyectable cartucho por 100U/mL; la única que no está siendo comercializada es la degludec100 U/ml solución inyectable pluma precargada 3 ml.
Sobre esta situación, el Invima comunicó que solo la próxima semana, entre jueves y viernes (29 de febrero y 1 de marzo), habrá disponibilidad nuevamente del medicamento para subsanar la crítica situación que se presenta en la actualidad.
Sin embargo, según explica Alexandra Gómez, presidenta de la Fundación de Diabetes de Colombia, las consecuencias que este déficit tiene para miles de pacientes implican numerosos casos de hospitalización por la falta de medicamento en las farmacias pues la administración de la insulina en estos pacientes no da espera.
Liliana Orozco, médica internista y experta en diabetes, agrega en SEMANA que en materia de diabetes “es tan grave no tratarla, como tratarla mal, ya que no tenerla bien controlada es tener niveles sostenidamente elevados de glucosa en sangre. Entonces, ¿qué pasa? Esto va a afectar los órganos”, de ahí la preocupación por la escasez de insulina en el país.
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