La producción piscícola en el Huila ha disminuido un 30%, generando escasez y precios más altos durante la Semana Santa. Las altas temperaturas del Fenómeno del Niño y la crisis ambiental en la represa de Betania son las principales causas, según los piscicultores.
Diario del Huila, Primer Plano
En medio de la anticipación por la celebración de la Semana Santa, los piscicultores del Huila enfrentan una dura realidad: la producción piscícola ha disminuido entre un 30% y 40 %, generando escasez y elevando los precios del pescado en la región. El Fenómeno del Niño y la crisis ambiental que ocurrió en meses anteriores en la represa de Betania son señalados como los principales culpables, según Álvaro Méndez, presidente de la Junta de Administración de la Cooperativa de Piscicultores del Huila.
Méndez explicó que la tilapia roja, uno de los principales productos de la región, ha sufrido una notoria disminución en su producción debido a las altas temperaturas del Fenómeno del Niño. La Represa de Betania, un área clave para la producción de este pez, ha experimentado un aumento en la mortalidad de los peces, exacerbando la crisis. La emergencia sanitaria en Betania, aunque controlada, ha dejado secuelas, generando nuevos patógenos en el agua que afectan a la tilapia roja.
«Observamos una marcada disminución en la producción, principalmente atribuible a un notable aumento en las tasas de mortalidad, tanto en la Represa de Betania, una región fundamental para la producción de este tipo de pez, como en lagos en tierra. Esta disminución en la producción puede atribuirse a las condiciones climáticas adversas derivadas del Fenómeno del Niño. La elevación significativa de las temperaturas ha provocado un calentamiento del agua, propiciando la generación de nuevos patógenos que afectan negativamente a la salud de la tilapia roja. Este fenómeno se ha manifestado de manera especialmente preocupante en la Represa de Betania, donde se produce una considerable cantidad de este producto«.
Baja producción
Se estima que la producción de tilapia roja podría disminuir entre un 30% y un 40% durante la temporada de Semana Santa, impactando significativamente el mercado local. Méndez destacó que la situación afecta no solo a la producción interna sino también a las exportaciones, aunque no cuentan con datos precisos sobre el alcance de estas afectaciones en el mercado internacional.
«Estas repercusiones tendrán un impacto desfavorable en el mercado nacional, el cual experimenta un aumento significativo durante la temporada de Semana Santa. En cuanto a las exportaciones, no disponemos de información específica sobre su situación. Sin embargo, sabemos que también se vieron afectadas por la emergencia sanitaria, lo que incidió negativamente en la producción de tilapia plateada, destinada principalmente a la exportación«, señaló el presidente de la Junta de Administración de la Cooperativa de Piscicultores del Huila.
Suben los precios
La calidad del agua se ha visto comprometida, creando un hábitat inadecuado para la vida acuática. La presencia de patógenos, altas concentraciones de amonios, bajones de oxígeno y cambios en el PH son factores que han contribuido al deterioro de las condiciones de cultivo de la tilapia roja.
Aunque algunas exportaciones de tilapia roja ya están en marcha, su impacto se siente principalmente en el mercado nacional. «Este riesgo de escasez no se limita únicamente a los días santos, sino que se observa un descenso en la producción desde el inicio de la Cuaresma. Desde entonces, hemos notado una disminución del producto, lo que significa que no se puede garantizar al 100% la satisfacción de la demanda. Ya estamos experimentando escasez de producto. Además, debido al Fenómeno del Niño, la subienda de peces también se ha visto afectada, ya que anteriormente ayudaba a complementar la producción. Los ríos están en condiciones precarias, lo que también ha perjudicado la producción natural”.
El presidente de la Junta de Administración de la Cooperativa de Piscicultores del Huila alertó sobre los impactos económicos para los consumidores. El consumo de pescado se prevé que tenga costos más altos este año, ya que la escasez del producto ha elevado los precios. Un ejemplo claro es la tilapia, cuyo precio ha pasado de seis mil pesos a una cifra entre 8 y 9 mil pesos por libra.
Frente a esta crisis, Méndez destacó que, diversas entidades gubernamentales han estado vigilantes y comprometidas en respaldar todo lo relacionado con los controles necesarios para garantizar que la actividad piscícola se desarrolle aplicando las mejores prácticas sanitarias y medidas preventivas que eviten la entrada de microorganismos a las plantas. «Afortunadamente, en el Huila, los piscicultores ya tenemos la tradición de trabajar en nuestros cultivos con rigurosas prácticas, ya que la calidad es de suma importancia para nosotros«.
Buscan alivios financieros
En respuesta a la crisis, se destacó la gestión activa de algunos créditos con entidades bancarias y la negociación de plazos. Esto cobra especial relevancia dado que algunos piscicultores han sufrido la pérdida total de sus producciones. La meta es obtener estos alivios financieros para ayudarles a recuperarse durante esta coyuntura adversa. «Dado que la mayoría cultiva a escala, cuentan con la flexibilidad de tener múltiples cultivos que pueden respaldarlos en momentos difíciles. No obstante, lamentablemente, muchos se verán forzados a abandonar el mercado«, concluyó.
En la actualidad, la asociación engloba a un total de 110 personas que forman parte integral de la cadena productiva. Esta cadena no se limita únicamente a la producción de engorde o alevinaje, sino que abarca desde plantas procesadoras hasta fábricas de hielo, comprendiendo toda la cadena de valor. La disminución en la producción impacta de manera significativa en esta cadena, generando una repercusión social en cascada de gran relevancia.
