El Juzgado Segundo Laboral de Neiva ordenó medidas provisionales urgentes para asegurar el suministro de agua mediante sistemas de carrotanque, mientras se solucionan los problemas en la infraestructura eléctrica que afectan el funcionamiento de la planta de tratamiento de agua.
Diario del Huila, Panorama
Desde el pasado 24 de marzo, el Centro Carcelario y Penitenciario de Rivera se enfrenta a una crisis humanitaria derivada de la falta de acceso al agua para las Personas Privadas de la Libertad (PPL) en los patios 6 y 7. Un fallo en la red eléctrica ha interrumpido el suministro de bombeo, dejando a cientos de personas en condiciones precarias.
Desde hace más de 16 días, las PPL en esta institución penitenciaria han estado lidiando con la escasez de agua, una situación que representa una grave amenaza para su salud y viola sus derechos humanos fundamentales.
Ante la falta de una solución efectiva por parte de las autoridades pertinentes, incluyendo el Instituto Nacional Penitenciario y Carcelario (INPEC) y la Unidad de Servicios Penitenciarios y Carcelarios (USPEC), el Juzgado Segundo Laboral de Neiva ha intervenido emitiendo una medida cautelar para asegurar el suministro de agua a estas personas.
En respuesta a esta emergencia, el Juzgado Segundo Laboral de Neiva ha emitido una medida cautelar para garantizar el suministro de agua a estas personas privadas de la libertad. Sin embargo, es urgente que las autoridades tomen medidas rápidas y efectivas para abordar esta crisis humanitaria.
La Personería de Neiva y la Defensoría del Pueblo hacen un llamado urgente a la atención sobre esta situación, destacando la importancia crítica del acceso al agua como un derecho humano básico.
“Decidimos interponer una acción constitucional en aras de proteger, el derecho fundamental de acceso al agua, en atención que desde el día 24 de marzo, se presentó un daño en la red eléctrica, afectando el suministro y bombeo de agua para los patios 6 y 7 del establecimiento carcelario de Rivera, que sirve también al municipio de Neiva”, explicó Jerson Andrés Bastidas, personero de Neiva.
Según el representante del Ministerio Público, se optó por instaurar una Acción de Tutela, como medida urgente, pues las condiciones de salubridad son precarias sumadas al sobrecupo de Personas Privadas de la Libertad que existe en este centro carcelario.
Ambas entidades reafirman su compromiso con la defensa de los derechos humanos y se comprometen a seguir trabajando incansablemente para garantizar que todas las personas, independientemente de su situación legal, tengan acceso a condiciones de vida dignas y saludables.
La falta de agua en estas instalaciones representa una grave amenaza para la salud y el bienestar de las PPL, así como una clara violación de sus derechos humanos fundamentales. La situación se agrava cada día que pasa sin una solución efectiva por parte de las autoridades competentes.
Medidas cautelares
La situación crítica de falta de acceso al agua en el Centro Carcelario y Penitenciario de Rivera ha llevado a la implementación de medidas provisionales urgentes. En respuesta a la acción de tutela presentada por la Personería de Neiva y la Defensoría Regional del Pueblo del Huila, el Juzgado Segundo Laboral de Neiva ha ordenado que se garantice el suministro de agua de forma expedita, incluso mediante sistemas de carrotanque u otros medios similares, hasta que se solucionen definitivamente los daños en los equipos eléctricos y electrónicos que afectan el funcionamiento de las plantas eléctricas, sistemas de bombeo, computadoras de visitas, red eléctrica y distribución de agua en la penitenciaría.
La medida provisional busca evitar un perjuicio mayor a los reclusos del Establecimiento Penitenciario de Mediana Seguridad y Carcelario de Neiva, quienes llevan sin servicio de agua desde el pasado 24 de marzo.
Dado que el proceso de tutela tiene un trámite sumario y expedito que no debe exceder de diez días, pero que podría resultar demasiado prolongado en lo que respecta al suministro de agua, se ha decidido actuar de manera inmediata y provisional.
En este sentido, se ordena al Establecimiento Penitenciario de Mediana Seguridad y Carcelario de Neiva, así como al INPEC y la Unidad de Servicios Penitenciarios y Carcelarios (USPEC), que procedan de manera inmediata, coordinada y dentro de sus competencias, a garantizar el suministro de agua potable para los internos de la penitenciaría.
Hacinamiento carcelario
El Establecimiento Penitenciario Medio de Seguridad de Neiva, EPMSC, es un centro de primera generación que acoge tanto a hombres como a mujeres. Con una capacidad diseñada para albergar a 984 internos, distribuidos en 100 plazas para mujeres y 884 para hombres, el centro debería operar dentro de límites aceptables.
Sin embargo, la realidad actual muestra una situación preocupante: hay 138 mujeres y 1422 hombres recluidos, lo que representa una sobrepoblación del 138% en el caso de las mujeres y del 160,8% en el caso de los hombres. Esta discrepancia entre la capacidad diseñada y la cantidad de internos evidencia un grave problema de hacinamiento en el centro penitenciario, lo que genera dificultades en términos de seguridad y condiciones de vida para los reclusos.
Este panorama como el de las Cárceles de Garzón, La Plata y Pitalito, fueron objeto de análisis en el marco de la Mesa Pública Penitenciaria que se llevó a cabo en la ciudad de Neiva el pasado 26 de febrero, donde según la Personería de Neiva, el hacinamiento, la infraestructura y los problemas de salud, son algunas de las necesidades más apremiantes para solucionar para las personas privadas de la libertad.
En esa mesa, el Procurador Departamental, Diego Alexis Tello Esquivel, hizo hincapié en la necesidad de que los alcaldes electos contribuyan proporcionando recursos y terrenos para la construcción de centros transitorios destinados a personas privadas de la libertad.
Esta medida busca hacer frente al alarmante problema de hacinamiento que se vive en la región, agravado por la propagación de enfermedades contagiosas como la tuberculosis.
