Ruber Bustos Ramírez
El inicio de la temporada de cosecha principal de café para el primer semestre del año en el departamento del Huila y en otros departamentos de Colombia es un acontecimiento de gran trascendencia tanto a nivel económico como cultural. El café, más que un simple cultivo, es un símbolo de identidad nacional y una pieza clave en la economía del país.
En el caso específico del Huila, donde se estima que la cosecha cafetera principal, que abarca los municipios del norte y occidente, alcanzará un valor estimado de más de $516 mil millones de pesos, su importancia se magnifica aún más.
Los datos recientes de la Federación Nacional de Cafeteros son alentadores, mostrando un aumento en la producción de café en comparación con años anteriores, pues según la FNC, la producción de café en Colombia aumentó 11% de febrero 2023 a enero de 2024, representado por un incremento de 821.000 sacos en el último periodo, no solo augura un impulso económico para la región y el país, sino que también refleja el esfuerzo y la dedicación de los caficultores colombianos.
Uno de los factores que ha contribuido a este aumento en la producción ha sido la sequía provocada por el fenómeno de “El Niño”, que, paradójicamente, ha favorecido la cosecha al generar un estrés hídrico beneficioso para el cultivo del café. Además, las perspectivas de una buena cosecha se ven reforzadas por la llegada de las primeras lluvias, según el Ideam, y la entrada en fase fría de “La Niña” en el segundo semestre del año, lo que podría consolidar un panorama favorable para la producción cafetera en los próximos meses.
Sumado a ello, el Huila, como epicentro del lanzamiento nacional del Plan Cosecha, se convierte en un punto de referencia para la coordinación y articulación de diversas entidades gubernamentales y actores del sector cafetero. Este plan integral tiene como objetivo optimizar la producción cafetera en la región, especialmente en el primer semestre, cuando se concentra la cosecha principal. La colaboración entre la Gobernación del Huila, la Policía Nacional, el Ejército Nacional y otras instituciones es fundamental para garantizar una cosecha exitosa, segura y sostenible.
En este contexto, es crucial que el Gobierno Nacional reconozca la importancia estratégica del café y brinde su apoyo continuo al sector. El reciente «retiro espiritual» convocado por el Presidente de la República, donde se espera que se aborden las repercusiones de las manifestaciones en Colombia, representa una oportunidad para que el gobierno demuestre su compromiso con el sector cafetero: escuchar las necesidades y preocupaciones de los caficultores y trabajar en conjunto con la institucionalidad para asegurar un futuro próspero para esta industria que es fundamental para el desarrollo económico y social del país.
