En el marco del Día del Trabajador, Colombia fue testigo de una manifestación masiva en apoyo a las políticas del gobierno del presidente Petro. El llamado del Jefe de Estado fue claro: salir a las calles para respaldar las reformas que se están adelantando.
A través de sus redes sociales, el presidente Petro no dudó en criticar las políticas laborales implementadas durante el gobierno del expresidente Álvaro Uribe. En sus palabras, «las medidas uribistas sobre el mundo del trabajo condujeron a los trabajadores de Colombia hacia casi una condición de esclavitud y acabaron con cualquier intento de aumentar la productividad en la economía».
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El mandatario lamentó que Colombia sea el país con las jornadas laborales más extensas en la OCDE y con una productividad notablemente baja, comparándolo con economías del siglo XIX. En su opinión, las políticas uribistas reflejaban una nostalgia por la esclavitud y un desconocimiento básico: «Las ganancias en la economía moderna salen de la productividad y no de la extensión de la jornada«.
Petro defendió las medidas actuales de su gobierno, argumentando que han generado un crecimiento sostenido del empleo formal y desestimulado el empleo informal. Destacó el aumento del salario mínimo por encima de la inflación, lo que ha resultado en la creación de más de 450,000 puestos de trabajo en el último año.
Según el presidente, mejores salarios no solo significan más empleo formal, sino también una mayor productividad económica, lo que se traduce en más riqueza y bienestar para la población.
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