Uno de los aspectos que está atrayendo la atención de las autoridades policiales desde el principio son las festividades de San Juan y San Pedro, que se celebran del 14 de junio al 1 de julio del presente año.
Durante este período, se ha observado un aumento en los episodios de violencia, atribuibles al consumo de bebidas alcohólicas, la aglomeración de personas y la gran cantidad de eventos organizados. Por lo tanto, se han llevado a cabo campañas de concientización dirigidas a un total de 16.000 personas.
Para respaldar este fenómeno, el año pasado se registraron 517 casos de lesiones personales en el área donde se lleva a cabo el festival. Estas cifras son un claro indicador de que nuestra sociedad sigue siendo propensa a la violencia, subrayando así la importancia de que los gobiernos implementen campañas de promoción de la cultura ciudadana.
35 asesinatos, dos menos que en 2023
En relación a los hechos de violencia, derivados de casos de intolerancia, el coronel Alexander Castillo Marín, comandante de la Policía Metropolitana de Neiva, expresó: “nosotros debemos regular las conductas sociales, en gran porcentaje a la comisión de delitos, porque cuando se fracturan los derechos de otras personas, allí se trasciende la esfera del Código Penal y se ven inmersos en conductas penales”.
“Para el caso del área metropolitana, tenemos cifras que son preocupantes y que nos moviliza en ese sentido, por ejemplo el Gobierno Nacional, tienen una estrategia social de protección a la vida y en ese orden de ideas, se debe resguardar a las personas. Y desafortunadamente en Neiva llevamos 35 homicidios, dos menos que las vidas pérdidas en el año 2023, hemos logrado reducir este flagelo y es muy importante”, destacó el oficial.
Por lo anterior, el coronel agregó que un compromiso de la Policía Nacional general las condiciones necesarias para la seguridad y la convivencia ciudadana, en este sentido las actividades se planea para realizar las actividades de control policial, los patrullajes, registro a personas e identificación a personas de vehículos y el desarrollo de las herramientas que propone la Ley de Convivencia y Seguridad Ciudadana.
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Riñas y muerte
Ahí viene lo preocupante del tema, según el coronel: “de los 35 asesinatos del año en curso, 10 corresponde a riñas callejeras, el 35%. Es decir que las personas por factores de convivencia e intolerancia, se producen peleas que luego terminan cobrándole la vida a las personas”.
De las 428 riñas callejeras documentadas que tiene la Policía Metropolitana, que es una cifra alta, este hecho debe llamar la atención de la ciudadanía, indicó el oficial y de las autoridades administrativas para trabajar en campañas de resolución pacífica de conflictos.
En cuanto a las peleas de pareja, se conoció que el año pasado hubo cinco casos denunciados, igual cifra existe en este mismo periodo y de peleas entre hermanos en este año, se han presentado dos casos, frente a los seis del 2023.
Peleas entre pandillas
“En cuanto a conflictos entre pandillas, tenemos documentado un caso, en este periodo, similar cantidad del año pasado. La ciudad tiene una atomización de delincuencia común organizada, y entre ellas se encuentran dinámicas asociadas a las rentas criminales”, reveló el coronel.
Entre los ‘negocios’ que se disputan las estructuras, son el microtráfico, extorsión y hurtos, principalmente.
Asimismo, se conoció que en ocasiones la ciudadanía no puede pasar de un barrio a otro por las llamas líneas invisibles entre las pandillas.
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Disputas documentadas
En el 2023 se registraron 502 riñas callejeras, mientras que en el período actual se han reportado 436. «Esta situación es preocupante, especialmente ahora que nos acercamos a las Fiestas de San Pedro, donde se observa un aumento en los episodios de violencia, atribuible al consumo de alcohol, la aglomeración de personas y la multitud de eventos», destacó el oficial.
Para abordar estos desafíos, se han llevado a cabo campañas de sensibilización dirigidas por los grupos de gestión comunitaria, que han organizado un total de 494 iniciativas. Estas campañas se centran en prevenir homicidios, lesiones personales y violencia intrafamiliar, impactando a 16.000 personas.
El coronel plantea algunas interrogantes importantes: ¿Dónde están las familias de los jóvenes involucrados en peleas? ¿Y la comunidad académica? Destaca la necesidad de realizar actividades educativas en los diferentes territorios como parte de la solución a este problema.
San Pedro, alcohol y ‘trifulcas’
“Llevamos 532 riñas en este periodo, lo tenemos en descenso, con menos 63 casos que representa el 11%. El año pasado en el perímetro donde se desarrolló el festival, en los 18 días, se presentaron 517 lesiones personales”, reveló Alexander Castillo.
El oficial indicó, esto propone una sociedad intolerante, con dificultades de convivir, de respeto, en vez de ser solidarios, empáticos con las demás personas. “Nosotros hacemos una recomendación, además a lo que está haciendo la Policía Nacional, es invitar a las personas a que usemos de los medios alternativas, vayan a otros a los centros de conciliación, que resuelvan esa cotidianidad de la calle que perjudica tanto”.
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¿Los neivanos son malos vecinos?
Por otro lado, se reciben alrededor de 20 quejas relacionadas con problemas de convivencia en el Centro de Conciliación y Resolución de Conflictos de la Policía, sumando un total de aproximadamente 600 al mes. Esta entidad desempeña un papel crucial en aliviar la carga de denuncias que enfrentan las Casas de la Justicia e Inspecciones de Policía.
Las personas pueden dirigirse al primer piso del Centro Comercial ‘Los Comuneros’ o a las instalaciones de la Policía Metropolitana de Neiva para recibir atención.
En este sentido, el Centro de Conciliación ofrece dos servicios principales: la conciliación y la mediación como alternativas para la resolución de conflictos, con el objetivo de evitar enfrentamientos entre vecinos.
Dialogamos con la intendente Andrea Cuenca, mediadora del Centro de Conciliación y Resolución de Conflictos de la Policía, quien destacó: «Son numerosas las personas que solicitan este servicio debido a una amplia gama de problemas que afectan la convivencia. Además, manejamos delitos conciliables, como los relacionados con la familia, para establecer acuerdos sobre la cuota de alimentos».
Entre los problemas más comunes se encuentran las disputas por deudas y arrendamientos, donde una parte no cumple con los pagos o no entrega la propiedad, generando conflictos entre ambas partes. «También nos enfrentamos a situaciones como el exceso de ruido, con equipos de sonido a todo volumen durante altas horas de la noche, así como la falta de limpieza por parte de los dueños de mascotas, quienes no recogen las heces de sus animales. Estos casos son recurrentes», añadió la agente.
Quejas por convivencia
«Diariamente, aproximadamente, recibimos unas 20 quejas. En cuanto al proceso en sí, el ciudadano llega, presenta su solicitud, lo asesoramos, recibimos su petición y programamos una audiencia de conciliación y mediación. Citamos a ambas partes, que deben asistir de forma voluntaria, y nos reunimos con un tercero imparcial», explicó la mediadora.
En el caso de la conciliación, se requiere la presencia de un abogado conciliador, mientras que en la mediación participa una persona neutral al conflicto. Durante estas reuniones, se elabora un acta de convivencia.
«Este documento tiene fuerza de cosa juzgada y proporciona un título ejecutivo, lo que significa que tiene valor para iniciar un proceso judicial. Trabajamos en estrecha colaboración con las Casas de Justicia e Inspecciones de Policía para ayudar a descongestionar sus cargas, y ellos, a su vez, nos remiten casos o procesos», explicó la intendente.
Además, se reciben numerosos conflictos derivados del consumo de alcohol, principalmente en fiestas familiares.