Ruber Bustos Ramirez
En este año desafiante para el café a nivel mundial, Colombia continúa avanzando con paso firme en la recuperación de su producción cafetera. Según los datos proporcionados por la Federación Nacional de Cafeteros (FNC), la producción de café durante el primer semestre de 2024 alcanzó los 5,82 millones de sacos, mostrando un crecimiento del 16% respecto al mismo periodo del año anterior. Este resultado es significativo, ya que eleva la producción total a 12,14 millones de sacos, una cifra que no se alcanzaba desde el año 2021.
Las exportaciones de Café de Colombia también han tenido un desempeño destacado, con un incremento del 36% en el mes de junio comparado con el mismo mes del 2023. En los primeros seis meses del año, las exportaciones sumaron 5,74 millones de sacos, un 15% más que en el mismo periodo del año anterior. Estos números reflejan un mes excepcional para nuestros exportadores y consolidan nuestra posición en el mercado global.
Por otro lado, las importaciones de café han mostrado una tendencia decreciente, con una disminución del 64% en junio y un total de 1,2 millones de sacos en el último año móvil, menos de la mitad de las importaciones registradas en 2022. Este fenómeno evidencia un creciente interés por el consumo de café 100% colombiano, fortaleciendo así nuestra industria y promoviendo la calidad y autenticidad de nuestro producto.
A pesar de estos logros en la producción y exportación, el consumo interno de café en Colombia se ha mantenido estable en 2,22 millones de sacos por año. Como gremio e industria, continuamos trabajando para mejorar esta cifra y fomentar el consumo de nuestro café local.
Estos resultados no son solo cifras; representan el trabajo diario y el compromiso de miles de caficultores que dedicamos nuestros esfuerzos a cultivar café de alta calidad en nuestras fincas. Además, destacan la eficiencia y la representatividad alcanzadas por la Federación Nacional de Cafeteros bajo una gerencia que ha promovido la modernización y la optimización de nuestros recursos.
En este contexto, hago un llamado a la nueva Ministra de Agricultura, Martha Carvajalino, para que continúe apoyando y trabajando de la mano con el gremio cafetero. Es fundamental impulsar políticas que promuevan la productividad y la sostenibilidad del café colombiano, sin generar divisiones y buscando siempre el beneficio colectivo.
El café colombiano no es solo una bebida; es nuestro orgullo nacional y una fuente vital de ingresos para miles de familias que vivimos del campo. Con esfuerzo y dedicación, seguiremos construyendo un futuro más próspero y sostenible para el café, y lo más importante, quienes lo cosechamos.
