En la Pista 14 del Roland-Garros, la tenista cucuteña María Camila Osorio se despidió del sueño olímpico al caer en tres sets frente a la estadounidense Danielle Collins.
Osorio, de 22 años, continuó la tradición del tenis femenino colombiano, alcanzando la tercera ronda olímpica, al igual que Fabiola Zuluaga en Sídney 2000 y Atenas 2004.
El partido, disputado durante la mañana del martes, comenzó con un primer set complicado para la colombiana. Collins se mostró imbatible, imponiéndose con un contundente 6-0 gracias a su agresivo estilo de juego y potentes saques, que no dieron tregua a Osorio.
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Sin embargo, Osorio no se dio por vencida. En el segundo set, ajustó su estrategia, mejorando su concentración y agresividad. Esta nueva táctica le permitió tomar ventaja temprana con parciales de 1-0 y 2-1. A pesar de la respuesta de Collins, quien remontó para ponerse 3-2, Osorio mantuvo la calma y aseguró el set con un 6-4, empatando el partido.
El tercer y decisivo set fue una montaña rusa de emociones. Collins tomó rápidamente la delantera, alcanzando un 5-1 que parecía definitivo. No obstante, la resiliencia de Osorio brilló una vez más, logrando reducir la diferencia a 5-3. Aunque la remontada parecía posible, Collins selló su victoria con un 6-3 final.
A pesar de la derrota, María Camila Osorio deja una marca imborrable en el tenis colombiano. Su actuación en los Juegos Olímpicos ha sido una fuente de orgullo para el país, demostrando que con determinación y esfuerzo, cualquier sueño es alcanzable. Con solo 22 años, Osorio tiene un futuro brillante por delante en el deporte blanco, inspirando a millones con su valentía y perseverancia.
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