El Gobierno del presidente Gustavo Petro sigue bajo su política de «paz total» al abrir un nuevo espacio de diálogo con el Clan del Golfo, uno de los grupos armados más notorios del país.
Ayer lunes se conoció la Resolución 257 del 8 de julio de 2024, en la que se establece la creación de un espacio de conversación “sociojurídico” con miembros de esta organización ilegal.
La iniciativa tiene como objetivo principal verificar la voluntad del Clan del Golfo de adherirse al Estado de derecho y definir los términos de su sometimiento a la justicia, conforme a lo permitido por la ley. Además, busca construir paz en las regiones afectadas por la presencia de este grupo armado, bajo la dirección del consejero comisionado de Paz.
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Para llevar adelante esta tarea, el Gobierno ha designado al politólogo Álvaro Jiménez Milán como el principal representante en la mesa de diálogo. Junto a él, la delegación oficial incluirá a María Gaitán Valencia, Armando Custodio Wouriyu, Víctor Negrete Barrera y Águeda Plata Gómez.
Además, el Gobierno ha reconocido a seis voceros del Clan del Golfo y ha solicitado la suspensión de sus órdenes de captura. Entre estos voceros se encuentran figuras clave como Jobanis de Jesús Ávila, alias Chiquito Malo, máximo comandante del grupo armado, y José Gonzalo Sánchez, alias Gonzalito, líder del Bloque Roberto Vargas que opera en el Bajo Cauca de Antioquia.
“El Espacio de Conversación Sociojurídico estará dirigido a verificar la voluntad de transitar hacia el Estado de derecho, fijar los términos de sometimiento a la justicia en los términos permitidos en la Ley”, se lee en la resolución.
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