Por: Mario Solano.
La institucionalización de la mentira en la sociedad por parte de los políticos es un tema muy grave, hoy es una practica común y aceptable siendo esto lo más preocupante, Hannah Arendt, filosofa política más influyente del siglo XX, explica el porque de la gravedad de la mentira, ya que es devastadora en una sociedad, porque el mentir constantemente, no es que se vuelve una verdad la mentira, no, es aun mas grave, ya que el pueblo termina sin reconocer que es verdad o que es mentira, lo que hace que culmine sin reconocer, que es malo o que es bueno, privándosele del poder de pensar y juzgar, ahí esta la gravedad de las mentiras permanentes, con un pueblo así, sencillamente puedes hacer lo que quieras, los individuos han perdido su autonomía, su moral, se distorsiona la realidad, por eso la mentira destruye la democracia, ya que una sociedad que es incapaz de discernir la verdad, no puede tomar decisiones informadas, ni participar de manera efectiva en el proceso democrático. Arendt advierte. En primer lugar, la mentira erosiona la confianza pública en las instituciones y en el liderazgo político. Cuando los ciudadanos descubren que han sido engañados, su fe en el sistema se ve comprometida, lo que puede llevar al cinismo, la apatía y, en última instancia, a la deslegitimación del gobierno. En segundo lugar, la mentira debilita la capacidad de la sociedad para actuar colectivamente, surgiendo la pregunta, ¿será que Colombia esta en estos planteamientos de la mentira sistemática? Toca diferenciar entre la mentira ordinaria, a la mentira organizada. La primera es algo aislado de falsedad, la segunda es un esfuerzo sistemático, organizado para construir una realidad alternativa. Muchos políticos mienten reiteradamente para controlar esa narrativa publica y reescribir la historia a su conveniencia, con la ayuda de la publicidad, la manipulación de la información, crean una realidad ficticia, sirviendo a sus intereses, típica de los regímenes afines a los totalitarios, para Arendt, la mentira organizada es una amenaza para la libertad humana, priva a las personas de su capacidad para comprender el mundo que les rodea y, para actuar de manera libre y autónoma. La acción política es posible solo cuando los individuos comparten una realidad, sin esa base común de hechos y verdades, la acción política se vuelve imposible, porque esta fraccionada o cambiada. La defensa de la verdad es, una condición necesaria para la preservación de la libertad y la dignidad humana en la vida política.
