Por: Ernesto Cardozo
La elección casi unánime del Procurador Eljach, consumada éste miércoles 2 de octubre, es la cuota inicial del Acuerdo entre los congresistas de la llamada centro derecha, para apoyar los proyectos de ley que interesan al gobierno, y finalmente sacar adelante y “consensuada’, la propuesta de Acuerdo Político formulada por el gobierno Petro.
Es decir, que ya es evidente la nueva dinámica política dirigida a bajarle el tono a la confrontación, para poder avanzar en la repartición de cuotas y prebendas que tanto halagan a nuestros dirigentes.
Más temprano que tarde, iremos viendo como el Procurador petrista mostrara sus verdaderos compromisos con el gobierno que lo terno, cuando empieza por aceptar como ya lo expresó, su identidad con el criterio del presidente en el sentido que la Procuraduría no podrá destituir servidores públicos de elección popular, mientras no hayan sido oídos y vencidos en juicio ante la justicia penal.
De esta manera se irá demostrando paso a paso, que el argumento aducido por los senadores de los partidos de la U, el conservador y hasta del CD; no lo eligieron por haberse ganado su confianza durante los 12 años de su solicito servicio en la Secretaria General del Senado; si no por conservar y/o incrementar sus cuotas burocráticas y para blindarse ante la eventualidad de la función disciplinaria del Ministerio Público.
Como dice el refrán popular “a otro perro con ese hueso”.
Volviendo al tema de la actividad legislativa, dicho Acuerdo permitirá favorecer el avance en el cumplimiento del Acuerdo de Paz de Santos con las Farc, circunstancia que podría estimular al ELN, aupado por la permanencia del tirano Maduro en
Venezuela, así como a los demás grupos criminales para entrar por el aro de la paz total de Petro; prolongando así el círculo vicioso de la violencia; mal endémico de la sociedad que debilitara cada vez más nuestra frágil democracia.
De esta manera iremos en franco retroceso hacia una sociedad y estado fallidos, donde podrían configurarse las condiciones adecuadas para que se instaurare la
dictadura ya sea de izquierda o de derecha, donde se sacrificaría el valor esencial de la libertad.
No se trata de ser agoreros de desastres. Se trata del realismo mágico bien conocido en el estilo literario del verdadero Nobel García Márquez.
POSDATA- La evidente violación del debido proceso en el juicio al expresidente Uribe, cuando se le niega por la Juez de la causa el derecho a conocer el contenido del computador y el celular decomisado por el Inpec al testigo de cargo Monsalve, constituye claro indicio que confirmaría el propósito perverso de sus adversarios políticos de lograr su condena, para de esta manera sacarlo del escenario político nacional, en el cual, sin duda alguna, su indiscutible liderazgo constituye una piedra en el zapato para los propósitos de la izquierda radical hoy en el poder.